Ella ha sido la única criatura que ha logrado ablandar mi corazón de piedra. Ella ha muerto y, con ella, han muerto todos los sentimientos de afecto que yo tenía para la humanidad
Recogiendo botones para acabar en una estación con corrientes de aire y luz de lámparas cuando los trenes ya se han ido, las vías húmedas desnudas y tensas como yo, todo atención por si tus pasos me siguen, pero antes muerto que mirar atrás.
Algo se marchitó en él: quizás la fe en la perennidad de la infancia.
¿cómo puedes creer en su hermosura si sabes que aquella humedad sólo está allí a fin de animar al capullo a florecer para que pueda caer, marchito y seco, en otoño?
Sentí una necesidad agónica, toxicomaníaca, de inhalar, hasta reventarme los pulmones, el olor de ella: olor de escuelita, de tinta china, de encierro, de sol en el patio, de papel del estado, de anilina, de tocuyo vestido a flor de piel -olor de la tinta china, flaco y negro-, casi un tiralíneas de ébano, fantasma de vacaciones...Y esto era mi primer amor.
Ni el grande, ni el rico deben satisfacer por precio los atentados contra el flaco y el pobre; de otra manera las riquezas, que, bajo la tutela de las Leyes, son el premio de la industria, se vuelven alimento de la tiranía. No hay libertad, cuando algunas veces permiten las Leyes, que en ciertos acontecimientos el hombre de ser de ser persona, y se repute como cosa.
El orden involuntario alimenta la insatisfacción, madre del desorden, padre de la guillotina. Las sociedades autoritarias son como el patinaje sobre hielo: Intrincadas, de una precisión mecánica y, sobre todo, precarias. Dentro de la frágil corteza de la civilización se agita el caos... y existen lugares donde el hielo es delgado a traición
Son celos cierto temor tan delgado y tan sutil, que si no fuera tan vil, pudiera llamarse amor.
Algo desagradable se aproxima cuando los hombres están ansiosos por decir la verdad.
El nacionalismo es como una ventosidad; algo placentero para quien lo emite, pero desagradable para quien lo siente.
Representa un gran placer conversar con las personas de edad. Ellas han recorrido el camino que todos debemos seguir y saben dónde éste es áspero y difícil y dónde es llano y fácil.
Parece que el lugar insidioso fue de Natura para engaños hecho, ciego, inútil, oculto y temeroso, sólo para asechanzas de provecho, a un lado el monte es áspero y fragoso, y entre sus peñas va un camino estrecho, debajo un campo llano y apacible a las faldas se ve del monte horrible.
La cosa es que, queriéndolo Él y pensando que se le da gusto, todo lo amargo se vuelve dulce y lo desabrido sabroso
Evaluar y prepararse a celebrar lo que se puede conseguir antes de hacerlo es un ejercicio estéril, antipático e innecesario que nunca presagia cosas buenas. Lo ideal es estar llenos de expectativas e ilusión, pero no evaluar lo que haría si, sino hacerlo después.
No hay nada en el mundo que pueda compararse con un rostro humano. Es una tierra que uno no se cansa jamás de explorar, un paisaje (ya sea árido o apacible) de una belleza única. No hay experiencia mas noble, en un estudio, que la de constatar cómo la expresión de un rostro sensible, bajo la fuerza misteriosa de la inspiración, se anima desde el interior y se transforma en poesía.
El proceso de desintegración avanza en riguroso orden desde la periferia al centro, de forma que el desprendimiento de las últimas posesiones ultramarinas parece ser la señal para el comienzo de la dispersión intrapeninsular
Mi esperanza es que la democratización del intercambio de conocimiento a través de la eficiencia en costos de internet más la criptografía, continuará y terminará con un registro histórico global que sea riguroso e indeleble. Y esto permitirá formas inmediatas de justicia que antes no estaban a disposición de la gente.
Soy estricto con mis hijos. No quiero que se encariñen conmigo ya que algún día puede que no vuelva a casa
Nuestra pasión es rozar el borde vertiginoso de las cosas. Sigue siendo lo que ha sido siempre: el límite estricto entre lealtad y deslealtad, fidelidad e infidelidad, las contradicciones del alma.
Pensamos que ya era tiempo de ser románticos, y entonces confeccionamos un paisaje ad-hoc, saturado del más puro idealismo, y barnizamos la luna de melancólico color.
(..) Ambos edificios se basan, al igual que todas las tareas, de la determinación de comprender el objeto puro es su naturaleza, la solución de la tarea.
Mariposa ebria, la tarde, giraba sobre nuestras cabezas estrechando sus círculos de nubes blancas hacia el vértice áspero de tu boca que se abría frente al mar alineando sus blancos lobeznos.
No se puede decir cuánto tiempo duró aquel áspero trabajo, porque esa clase de trabajos no pueden medirse en días o meses.
Es un hecho demostrado en todo el mundo que el aumento brusco del precio de los alimentos genera malestar político e inestabilidad social en las ciudades.
Siempre me ha sorprendido la escasa finura de mis contemporáneos, a mí, cuya alma se retorcía de la mañana a la noche tan sólo para encontrarse.
Cuando me coloco delante de un lienzo, no sé nunca lo que voy a hacer; y yo soy el primer sorprendido de lo que sale.
Lo que más me ha impresionado de este siglo XX que finaliza es la estupidez y brutalidad humanas
El mundo siempre ha estado más impresionado del poder de nuestro ejemplo que del ejemplo de nuestro poder
Quienquiera que haga una película tiene derecho a su propia interpretación. He amado y admirado un montón de películas que sentía que trataban de algo distinto a lo que yo estaba viendo
Yo he querido hacer lo mismo en muchos cuentos y he sido admirado por ese hallazgo, que es el hallazgo de Dante en la Edad Media, el de presentar un momento como cifra de una vida.
La experiencia es un peine que te lo dan cuando te quedas pelado
El amor es lo más parecido a la guerra, y una guerra en la que es indiferente vencer o ser vencido, porque siempre se gana.
No se puede ser indiferente ante la contaminación interior del hombre.
Sé flexible como un junco, no tieso como un ciprés
Todo curiosamente se va ajustando, serenando. Las incógnitas sombrías que se alzaron al comienzo del viaje se han ido despejando hasta llegar al escueto panorama presente.
A la humanidad le espera un infierno. Un infierno de planeta, desértico y sin agua, y atestado de gente. Esa paradoja es desesperante. Ahí se entenderá en toda su magnitud la frase de Sartre sobre que el infierno son los demás
En la palma de la mano una luciérnaga. ¡Ah! Su frío reflejo.
Podemos comparar la sociedad con una hoguera cerca de la cual se calienta la persona prudente, pero a la debida distancia y sin meter las manos en ella, como hace el necio. Éste, tras haberse quemado, huye al frío de la soledad y se lamenta de que el fuego queme.