Teníamos un pacto de muerte. Tengo que llevar a cabo mi parte del trato. Por favor, enterradme cerca de mi nena, con mi chaqueta de cuero, mis vaqueros y mis botas de motorista. Adiós.
Bueno, El Esmoquin dice chico tranquilo pero la chaqueta de cebra dice Peligro, Peligro, aléjate de mi hija. A la chica gótica le gustarás por eso.
Los que tratamos de tomar la antorcha y seguir los pasos de Jesucristo, no debemos descansar hasta que los muros de la injusticia, la exclusión y la mentira caigan en nuestra preciosa tierra americana ancha y enajenada.
Es imposible dentro de los Estados Unidos separar la política de la religión. Durante toda su historia se han mezclado. Y la religión americana ha sido peculiarmente comprometida con la política.
La pobreza a menudo priva al hombre de toda virtud: es difícil que un costal vacío se mantenga derecho
A los seis años yo cargaba un costal y sembraba papas. Marcaba los surcos en los que yo había sembrado cada papa. A los 4 ó 5 meses veía cómo, en el lugar en el que yo había colocado una papa, ahora aparecían 15 ó 20 papas. Eso me parecía mágico. Me sentía partícipe de esa magia.
Una cita a ciegas puede convertirse en un cerdo con sombrero y un bolso de mujer.
La verdad es que el conjunto de los vestigios humanos descubiertos en un siglo de investigaciones por toda Europa ocupa muy poco espacio. Cuidando el embalaje, podríamos hacer que un bolso de fin de semana guardara todos los restos anteriores a la glaciación de Riss y Würm, un cofre resultaría más que suficiente
Hada fiel que mi dicha con sus hechizos forja, es moneda en mi alforja y en mi ruleta es ficha.
Si vuestra majestad lo ve así, entonces vuestra majestad no me ha interpretado bien, pues siempre he considerado sumamente indecoroso y absurdo que la mujer tome el puesto de instructora o maestra de su señor y marido; ella debe aprender de su marido y ser enseñada por él.
La mujer no debe depender de la protección del hombre, sino ser enseñada para protegerse a sí misma.