Vengo de un mundo lleno de caminos, montaña, selva, mar, prado y arena. ¡Traigo una sed de paz, tan infinita!...Hazme un nido de amor para mi pena.
Me tomo un vaso de agua y muero en la sed de tu cuerpo.
Dale al trabajador su salario antes de que se haya secado el sudor de su frente.
Una sarna incurable por escribir toma posesión de muchos, y crece en forma empedernida en el corazón de los insanos.
La sarna no se cura eliminando al perro, cuando así se pretende, es porque lo que se detesta no es la sarna, sino a los perros