Cuando alguien me pregunta por qué hablo tan poco y mal de mi difunto padre le contesto con un par de bofetadas, mi padre hubiera hecho lo mismo
Pero ni aun así adquirió el difunto un aspecto púdico y decente: era un muerto de carnaval, ni siquiera mostraba sangre de bala o de puñalada corriéndole por el pecho que pudiera rescatarlo de su condición de mascarita.
Por medio del presente, el Grupo Pachuca lamenta profundamente informar que este mediodía del martes 4 de diciembre de 2012, el máximo símbolo de los Tuzos, Miguel Ángel Calero Rodríguez, ha fallecido
A mí me encantan las inscripciones en las guardas y las notas en los márgenes: me gusta el sentimiento de camaradería que suscita el volver páginas que algún otro ha pasado antes, así como leer los pasajes acerca de los que otro, fallecido tal vez hace mucho, llama mi atención.
Así como cae exánime la mariposa en el umbral, sorprendida por el cierzo helado, así también todos los pensamientos terrenos deben caer muertos ante el templo.
La Naturaleza establece una transición tan gradual entre lo inanimado y lo animado que las fronteras que separan ambos reinos son indistintas y ambiguas.
¿Por qué se marchitó la flor? Se marchitó la flor porque la abracé junto a mi corazón, por eso se marchitó la flor
¿Cómo es posible, que tanta belleza oculte un corazón duro y lacerado? ¿Por qué le amo, por qué me apoyo, cansado, en su irresistible e indómita fortaleza? ¿Acaso no es el espíritu marchito y fúnebre de un hombre muerto vestido con la ropa de un niño?
¡No permanezcas a mis ruegos muda! Que estoy más desolado que, en su nido, el ave a la que cubre blanca nieve.
Tu cuerpo es el país de las caricias, en donde yo, viajero desolado - todo el itinerario de mis besos - paso el otoño para no morirme, sin conocer el valor de tu ausencia como un diamante oculto en lo más triste.
Madrid, deshabitado como mi colchón el verano en que me hice mayor, y ella que ya no llama.
A la humanidad le espera un infierno. Un infierno de planeta, desértico y sin agua, y atestado de gente. Esa paradoja es desesperante. Ahí se entenderá en toda su magnitud la frase de Sartre sobre que el infierno son los demás
La felicidad nunca es triste ni alegre, es la felicidad.
Sentía que se había producido en mi un gran cambio: mi emoción era mucho menos triste que el abatimiento en que estaba sumido hacía mucho tiempo. La tristeza de la separación se mezclaba con vagas pero dulces esperanzas, con la espera impaciente del peligro y con el sentimiento de una noble ambición. La noche se me hizo corta.
El corazón que no ama es una cisterna tenebrosa, un depósito inmóvil que no recibe ni da. El corazón que ama es el remanso a cielo abierto, donde las mil corrientes del mundo descansan un instante para partir otra vez.
El camino estaba congelado. La aldea estaba en silencio, inmóvil bajo el cielo estrellado. Komako alzó los faldones de su kimono y los acomodó en el obi. La luna parecía cortada a cuchillo contra el hielo espectralmente azul.
Mi surrealismo era combativo y revolucionario, el de ahora es estático y conservador.
La elección de la estructura es sinónimo de la elección de la luz que da forma a ese espacio. La luz artificial es sólo un breve momento estático de la luz, es la luz de la noche y nunca puede igualar a los matices creados por las horas del día y la maravilla de las estaciones
La doctrina judía del marxismo rechaza el principio aristocrático de la naturaleza y antepone la cantidad numérica y su peso inerte al privilegio sempiterno de la fuerza y del poder
El término nirvana significa exhalar -el suspiro de alivio-, algo de lo que nos alejamos en el mismo momento en que retenemos la respiración. Cuando nos aferramos a nosotros mismos, a la vida, a la respiración, al espíritu o a dios, todo queda reducido a algo tan inerte como una piedra o un ídolo. Pero cuando soltamos y exhalamos, la respiración volverá. Eso, precisamente, es el nirvana.
La Naturaleza establece una transición tan gradual entre lo inanimado y lo animado que las fronteras que separan ambos reinos son indistintas y ambiguas.
El que llega primero al campo de batalla espera la llegada del enemigo fresco para combatir. Quien llega tarde al campo de batalla tiene que apresurarse y arriba exhausto al combata.
La miré sin comprender, aunque como un nadador solitario y exhausto la verdad poco a poco se fue abriendo paso en el mar negro de mi ignorancia.
Sé la carga que llevas en tus espaldas para gobernar este país, sé las presiones que sufres, pero Mauricio, hay algo que te va a hacer tener el mismo éxito que nosotros: jamás pierdas la paciencia y no tomes ninguna actitud precipitada, cuenta hasta diez y ahí tomas tu decisión
La gloria es una carga pesada, un veneno que asesina, y soportarla es un arte.
Así, con cada avance en los conocimientos científicos surgen nuevos elementos que, a menudo nos obligan a reformular nuestra imagen de conjunto de la realidad física. Sin duda, los teóricos preferirían perfeccionar y modificar sus teorías en lugar de proceder continuamente a su desguace. Sin embargo, esta obligación es la condición y el precio de todo el progreso científico
La honestidad no es una virtud, es una obligación
Dar respuesta a las amenazas, como por ejemplo la degradación del medio ambiente, supone al mismo tiempo un ejercicio de responsabilidad. Respuesta y responsabilidad tienen la misma raíz: response.
Los editores tienen la responsabilidad de seducir a su audiencia con la verdad. Por esta razón es que intenté hacer de Colors una revista tan sexy y atractiva como fuera posible, como los caramelos o los canapés, tan suculentos que no puedes resistirte.
¿Puedes imaginar el tipo de responsabilidad que tengo con mi reputación? Estoy postrada en la cama la mayor parte de la semana.
(...)La victoria total, completa, aplastante de un bando sobre el otro, cargará al vencedor con la responsabilidad de todos los errores cometidos y proporcionará al vencido la base de la futura propaganda, tanto dentro como fuera de nuestras fronteras.
Creen, porque la gente no habla ya de mí, que estoy más acabado que Antonio Machín.
A mí me ganaba por la palabra, pero si hubiéramos acabado por llegar a las manos le juro a usted por mis muertos que lo mataba antes de que me tocase un pelo. Yo me quise enfriar porque me conocía la carácter y porque de hombre a hombre no está bien reñir con una escopeta en la mano cuando el otro no la tiene.
Doy por finiquitado el siglo XX. Doy por inaugurado el siglo XXI
No queremos muchos accesorios en el escenario, aunque tenemos un poco de hielo seco (...). Por cierto, no utilizamos vapor. Un periodista neoyorquino dijo que usábamos vapor, y me imaginé a nosotros detrás del escenario con teteras hirviendo
Un cambio en los climas del corazón vuelve seco lo húmedo, la bala de oro estalla sobre la tumba helada. Un clima en la comarca de las venas cambia la noche en día; la sangre entre sus soles ilumina al viviente gusano.
Tal la exangüe cabeza, trunca y viva, de un mandarín decapitado, en una macábrica ficción, rodó la luna sobre el absurdo de la perspectiva...
La tortura ha desaparecido del Código. Cosa diferente es que desaparezca de las costumbres.
La filosofía política, en el sentido en que hemos intentado describirla...Hoy está en decadencia o, quizás, en estado de putrefacción, si es que no ha desaparecido por completo.