La ambición es el excremento de la gloria.
Sobre el excremento del caballo Las flores que cayeron del ciruelo rojo Parecen besarse
El amor es el eje y el aliento de mi vida. El arte me produce un subproducto, una excrecencia del amor, la melodía, la alegría, la abundancia, sólo eso.
En caca seca no se paran ni las moscas. ¿No es eso la Pureza? No.
Antes de la guerra en el Medioriente el principal deporte de nuestra clase consistía en molestar a Toru. Chino chino japonés: come caca y no me des.... Toru, el mejor del grupo, sobresaliente en todas las materias.... Hoy dirige una industria japonesa con cuatro mil esclavos mexicanos.
¿Quiere que le diga una cosa? Todo ese amor de que tanto se oye hablar en estos días es sucio. Eso es lo que es: sucio. Uno mira a la gente que lo vocea y tiene la sensación de suciedad moral y espiritual, no natural, indecente.
Va cayendo suciedad a la cámara subjetiva de la cámara del piloto finlandés Kimi Räikkönen
Además, llevo dando vueltas bastante tiempo y me he dado cuenta de que quienes han de brillar, brillarán aunque tengan seis capas de porquería encima, mientras que los que no son relucientes, no relucen por mucho que les des con el paño.
Porque en general, cuando sos una porquería de persona te rodeás de personas de porquería. Entonces el círculo se cumple majestuosamente. Y cada uno tiene lo que merece.
En política se está en contacto con la mugre y hay que lavarse para no oler mal.
Dios pone a funcionar el electromagnetismo de acuerdo a la teoría de ondas el lunes, miércoles y viernes, y el diablo de acuerdo a la teoría cuántica el martes, jueves y sábado.
La felicidad del pobre parece la gran ilusión del carnaval, la gente trabaja el año entero por un momento, un sueño para hacer la fantasía de rey, de pirata o jardinero. Para todo acabarse el miércoles
Sigue tus deseos mientras vivas y no hagas más de lo que es debido; no disminuyas el tiempo de seguir tus deseos, ya que desperdiciar el tiempo es una abominación para el espíritu... Cuando ganes riquezas, sigue tus deseos, ya que la riqueza no es ganancia si uno está inactivo.
Nada ni nadie puede compensar a las numerosas víctimas de la lacra terrorista por la irreparable pérdida de sus vidas, por el sufrimiento que genera sus heridas o por la dolorosa huella que dejan sus cicatrices.