Un tipo profundamente feo y borracho de verdad.
Más vale feo y bueno que guapo y perverso.
Cuando un hombre pega a su amante inflinge una herida; cuando pega a su esposa es un suicidio.
Hoy en día es muy peligroso para un marido galantear a su mujer en público. Hace pensar siempre a la gente que le pega cuando están a solas.