La ilusión y el apasionamiento se conquistan mejor con el cultivo de la discriminación. La vanidad se supera con simplicidad. La arrogancia con cortesía.
Temprano en la vida tuve que elegir entre la arrogancia honesta y la humildad hipócrita. Elegí lo primero y no he visto razón para cambiar
Imagínate tú que hace siglos que has muerto. No te preguntan las cosas, si pasas, quién eres. Procura un instante pensar que tus brazos no pesan. Son nada más que dos cañas, dos gotas de lluvia, dos humos calientes.
El aeronavego astral que habitó la Tierra en la civilización caldea trajo entonces naves con formas de gigantescos peces rojos y las usó para portar humanos seres al planeta Ki En Ki. Hoy de nuevo traerá sus gigantes naves rojas para igual salvar de los tres humos a los seres terrenos y por tales al Ki En Ki. ¡Les regresará en el año 2000!
Una relación genuina es aquella en la cual no domina el ego con su búsqueda del yo y su creación de imágenes. En una relación genuina hay una corriente de atención sincera y alerta hacia la otra persona, en la cual no hay sensación alguna de deseo. Esta atención alerta es la Presencia. Es el requisito para toda relación auténtica.
Mi ego sólo necesita una buena sección rítmica.
Si fueramos una partida de pedantes que contempláramos el mundo desde la atalaya de la suficiencia y de la infabilidad, empleando siempre los mismos procedimientos de lucha y la misma táctica, sin preocuparnos de los cambios de situación, entonces no seríamos el Partido del proletariado.
No me parece que la luciérnaga extraiga mayor suficiencia del hecho incontrovertible de que es una de las maravillas más fenomenales de este circo, y sin embargo basta suponerle una conciencia para comprender que cada vez que se le encandila la barriguita el bicho de luz debe sentir como una cosquilla de privilegio
La dignidad comienza donde la jactancia acaba
Hombre que vais por el mundo: atended y entended. El tiempo de la confusión es ya en ustedes. Aún resta un tiempo... Comprende, observad, entended. Ya la gente cayó en la imitación pueril, en el vulgar inicuo, en la jactancia banal, en la ignorada desvergüenza; desubicada corre tras el oro por él robará, estafará, la ganará, en bien o mal hasta él... ¡Basta! El oro en castigo: ¡caerá!
Es necesario que tu película despegue. La hinchazón y lo pintoresco le impiden levantar el vuelo.
¡No me importan los motivos económicos ni las finalidades utilitarias! Pero. ¡Oh....SI...¡ La blanca altivez de las montañas, que invaden el horizonte bajo un azul absorto y sin arrugas.
Los pesimistas dirán que soy muy pequeño para la obra que tengo emprendida; pero mi insignificancia está sobrepujada por la altivez de mi corazón de patriota, y así juro ante la Patria y ante la historia que mi espada defenderá, el decoro nacional y que será redención para los oprimidos
Pronto cansa la altanería de una mujer hermosa; nunca aburre la de una mujer buena.
Cuántas veces ardían hogueras en el pozo de tus sueños, jaurías de tempestades que guardaron su sed bajo el humo de un arcángel, la humedad del relámpago para tu voz de fuego.
¿Cuánto tiempo pueden los hombres prosperar entre paredes de ladrillo, caminar sobre pavimentos de asfalto, respirando humo de carbón y de petróleo, crecer, trabajar, morir, con apenas una idea sobre el viento, el cielo, y los campos de grano, viendo sólo la belleza hecha máquina, con la calidad de vida semejante a la de los minerales?
Más reinos derribó la soberbia que la espada, más príncipes se perdieron por sí mismos que por otros
Lo que nos faltaba con el demócrata este de..., es lo más fascista que he visto en mi vida como presidente. Sí, lo más parecido a un fascista, aunque no puede serlo porque hace años que desapareció. Su actitud de prepotencia y soberbia sí es de fascista
Te miro, y lloro porque no me miras: me miras, y suspiro al hallar el desdén en tu mirada: suspiro, y lloro porque no suspiras, suspiras ¡ay! Y acongojado miro que no es por mí...
Los que nacen con la conciencia superior de los destinos de su vida, nada los fascina ni embriaga, porque no sólo tienen el más profundo desdén por todos los poderes de la tierra, sino también, por cuanto pudiera desviarlos de su propia recta orientación.
Es fácil ver las faltas de los demás, pero ¡qué difícil es ver las nuestras propias! Exhibimos las faltas de los demás como el viento esparce la paja, mientras ocultamos las nuestras como el jugador tramposo esconde sus dados
Las alegrías son como las flores que la lluvia mancha y el viento deshoja.
Es tan necia presunción perdonar la vida a los hombres como el corazón a las mujeres.
Para mi, buscar la sencillez y lucidez es un deber moral de todos los intelectuales; la falta de claridad es un pecado y la presunción un crimen.
El que se vanagloria de su linaje, alaba lo ajeno.
¿Por qué razón el hombre se vanagloria de poseer una sensibilidad superior a la del bruto? Si nuestros impulsos se limitaran al hambre, la sed y el deseo, seríamos casi libres; pero nos conmueve la más ligera brisa, y tan sólo una palabra o la imagen que ésta despierta en nosotros, inquieta nuestro espíritu.
El instinto es un consejero leal; en tanto que la pedantería es un aire mefítico que ahoga los buenos sentimientos
Lo que se llama erudición y lo que se llama estilo, generalmente no es más que pedantería y amaneramiento.