Un talismán es cualquier objeto, sagrado o profano, con o sin apropiadas inscripciones de símbolos; no cargado, o consagrado mediante adecuado ritual mágico o meditación. Entre otras cosas ejerce en quien lo lleva un efecto auto-sugestivo. Está hecho para servir a una finalidad específica, para traer buena fortuna en algún sector de la vida o para alcanzar una meta específicamente denominada.
Hay por lo menos dos vías de acceso diferentes relacionadas con esta cuestión de consagrar o cargar el talismán con un tipo específico de energía. El primer método se basa en cierto tipo de meditación, el segundo es una consagración mágica ceremonial.
Un pedazo de luna en el bolsillo es mejor amuleto que la pata de conejo.