De forma nefasta, el clero paga motines pretorianos en efectivo con el dinero del pueblo mexicano, que lo ha dado para alimento o cobijo de pobres y menesterosos
Miré una y otra vez al cielo, absorta en esos pensamientos. Estoy aquí, ahora, con mi cuerpo, mirando al cielo. Éste es mi espacio. Absorta en esa vida a la que mi cuerpo sólo daría cobijo una vez, bella como el crepúsculo que resplandecía a lo lejos.
Oh Luna! Siempre estuviste a mi lado, alumbrándome en los momentos más terribles; desde mi infancia fuiste el misterio que velaste por mi terror, fuiste el consuelo en las noches más desesperadas, fuiste mi propia madre, bañándome en un calor que ella tal vez nunca supo brindarme.
Es algún consuelo en las desgracias hallar quien de ellas se duela.
Allí, oculta a los ojos extraños, han despejado la soleada falda de un monte, de cara al mediodía, y en ella crecen vides dispuestas en ordenadas hileras. Al recordar la belleza de aquel lugar se le parte el corazón. Hombres, mujeres y niños se desplazan lentamente por el viñedo, con los cinco sentidos puestos en el cuidado de las cepas.
Su falda semejante a viento azul que llega como una promesa concedida.
Las uniones de hecho están produciendo muchísimo más deterioro en la convivencia y se produce más violencia en el seno de las uniones de hecho que en las uniones matrimoniales
Los problemas de carácter ideológico y los problemas de controversia en el seno del pueblo, pueden resolverse únicamente po métodos democráticos, por medio de la discusión, la crítica, la presuación y educación, y no por métodos coactivos y represivos.