No hay tiranía más cruel que la que se perpetra bajo el escudo de la ley y en nombre de la justicia.
Lo que se ha instaurado en el mundo es una sociedad capitalista, con todo lo que en ella es vulgar, cruel y estúpido, con advenedizos, estafadores y timadores, con la grotesca chabacanería de los nuevos ricos. La crueldad del dinero ha sustituido a la crueldad de la política. La necedad comercial ha sustituido a la necedad ideológica.
La dudosa moralidad de la sentencia de que vale más malo conocido se aplica con harta frecuencia aquí. Quizá por eso se hable tanto de relevo generacional, de aporte de sangre joven y tanto otro infatigable lugar común, que por descontado, alude a una realidad que no se da
Lo malo no es el hombre, es la sociedad, pues está hecha para que el hombre caiga
Vaya con suerte quien se crea astuto porque ha sabido acumular objetos. Pobre mortal que, desalmado y bruto, perdió el amor y se perdió el respeto
Aunque es algo demasiado ruin para que la gente lo reconozca con naturalidad, todo hombre que se siente atraído por una fémina experimenta un odio fisiológico hacia el tipo que se la benefica, normal o esporádicamente
La avaricia es de naturaleza tan ruin y perversa que nunca consigue calmar su afán: después de comer tiene más hambre
Jesús va al desierto y allí experimenta la tentación de dejar el camino indicado por el Padre para seguir otros caminos más fáciles y mundanos. Así Él se carga de nuestras tentaciones, porta consigo nuestra miseria para vencer al maligno y abrirnos al camino hacia Dios, el camino de la conversión.
Por el cosquilleo de mis pulgares, algo maligno viene hacia mi.
Los temores, las sospechas, la frialdad, la reserva, el odio, la traición, se esconden frecuentemente bajo ese velo uniforme y pérfido de la cortesía.
Desconfiemos siempre de los que nos creen capaces de mayores triunfos de los que hemos podido lograr. Es el modo pérfido de considerarnos fracasados.
El hombre de genio ha de obtener lo que necesita para no depender de nadie. Mas si obtenida esta tranquilidad pierde el tiempo en aumentar su fortuna, no es un hombre de genio, sino un miserable
¿Por qué, vuelvo a preguntar, esa misericordia tan grande conmigo, más miserable que todos, mientras que, sin dejar de ser misericordioso, has negado tu conocimiento por tantos siglos a los pobres infieles?
No es lo que los otros hacen ni nuestros propios errores lo que más nos daña, es nuestra respuesta. Si perseguimos a la víbora venenosa que nos ha mordido, lo único que conseguiremos será provocar que el veneno se extienda por todo nuestro cuerpo. Es mucho mejor tornar medidas inmediatas para extraer el veneno.
En el odio nazi no hay racionalidad: es un odio que no está en nosotros, está afuera del hombre, es un fruto venenoso nacido del tronco funesto del fascismo pero está afuera y más allá del mismo fascismo.
Si hay palabras y agravios como cuchillos, cuyas profundas heridas nunca cicatrizan ultrajes cortantes e insultos de dentado y venenoso filo, hay también palabras de consuelo demasiado dulces para el oído receloso, y cuyo eco perdura en nuestra memoria: detalles que son como caricias...
La poesía debe concebirse como un violento asalto contra las fuerzas desconocidas, para obligarlas a arrodillarse ante el hombre.
No puede esperarse ventaja alguna duradera de la política moral, si ésta no se funda en los sentimientos indelebles en el hombre. Toda ley que se desvíe de éstos, encontrará siempre una resistencia contraria que al cabo vencerá, del mismo modo que una fuerza, aunque sea muy pequeña, si se aplica muy continuadamente, vence cualquier movimiento violento comunicado a un cuerpo.
El concepto del derecho que no corresponde a un deber es un derecho burgués, detrás del cual se esconde alguna alimaña de clase.
Pido a las generaciones futuras que algún día reivindiquen mi nombre, ya que muero como un bandido en tierra extraña.
¿Quién conoce el fin? Lo que ha emergido puede hundirse y lo que se ha hundido puede emerger. Lo satánico aguarda soñando en el fondo del mar, y sobre las ondulantes ciudades humanadas navega el apocalipsis.
Afganistán es atacado por un dragón satánico de tres cabezas: los bandidos locales, las fuerzas reaccionarias de la región y el imperialismo mundial encabezado por Estados Unidos.
Si sólo hay un creador que hizo al tigre y al cordero, al guepardo y a la gacela, ¿a qué está jugando? ¿Es un sádico que disfruta siendo espectador de deportes sangrientos?
Este tratamiento insensible, sádico y villano contra los judíos, que ahora ha durado varios años -- con su objetivo final de la extirpación - es la mancha más grande en el honor de Alemania. Nunca podrán borrar estos crímenes.
Un político, que extermina hombres para ascender, es considerado, según su éxito, como un facineroso o como un héroe.
Estoy convencido, de que si los esfuerzos por divorciar la política de la religión no se hubiesen hecho como se hicieron, la política no habría degenerado como con frecuencia ocurre... He conocido a muchos hombres religiosos que eran políticos disfrazados. Yo mismo, que tengo la apariencia de político, soy, de corazón, un hombre religioso.
Ya hemos indicado, por otra parte, que el favorecer la irrupción de los maketos es fomentar la inmoralidad en nuestro país; porque si es cierto que las costumbres de nuestro pueblo han degenerado notablemente en ésta época, débese sin duda alguna a la espantosa invasión de los maketos, que traen consigo la blasfemia y la inmoralidad.
Aquella conversación me estaba interesando cada vez más. Yo era igual de depravado que los demás jóvenes de mi edad, y el carácter abyecto de mi propósito me importaba un ardite ahora que se habían despertado el amor propio y todas las pasiones que se mezclan en este tipo de romances.
El deseo masculino es naturalmente explicable, pero el femenino es culturalmente depravado
Y toda existencia es maldito sufrimiento.
¿Por qué diablos esos idiotas editores no dejan de poner fotos de escritores en sus sobrecubiertas? Compré un libro perfectamente bueno... Estaba dispuesto a que me gustara, había leído sobre él y entonces le echo una mirada a la foto del tipo y es obviamente un completo imbécil, una basura realmente abrumadora (fotogénicamente hablando) y no puedo leer el maldito libro.
Del maldiciente al malhechor sólo media la ocasión
En España la forma mejor de asegurarse una larga estancia en prisión en estos momentos es ingresar en ETA, con una particularidad: que desde el día en que un malhechor de ETA pone la bomba hasta el día que ingresa en la cárcel cada vez pasa, cada vez transcurre menos tiempo.
Tuve el malicioso placer de confundir al lector, de mantenerle en la incógnita, privándome de la panoplia tradicional de los cómics: no hay malos, no hay verdadero suspense y no hay aventura en el propio sentido del término.
La falsificación de moneda, por tanto, es inflacionaria, tiene un efecto de distribución, distorsiona el sistema económico y equivale a un sigiloso y malicioso robo y a la expropiación a todos los legítimos propietarios de la sociedad.
Del hablador he aprendido a callar; del intolerante, a ser indulgente, y del malévolo a tratar a los demás con amabilidad. Y por curioso que parezca, no siento ninguna gratitud hacia esos maestros.
Del hablador he aprendido a callar, del intolerante a ser indulgente y del malévolo a tratar a los demás con amabilidad. Y por curioso que parezca, no siento ninguna gratitud a esos maestros.
¿Quién conoce el fin? Lo que ha emergido puede hundirse y lo que se ha hundido puede emerger. Lo satánico aguarda soñando en el fondo del mar, y sobre las ondulantes ciudades humanadas navega el apocalipsis.
Afganistán es atacado por un dragón satánico de tres cabezas: los bandidos locales, las fuerzas reaccionarias de la región y el imperialismo mundial encabezado por Estados Unidos.