Todos esos oportunistas que se llaman socialistas pueden irse. ¿Son acaso algo más que un desecho que la historia arrojará al cesto de la basura?
El gobernante está expuesto al negocio de la prensa amarilla, mezcla de extorsión, conventillo y escándalo. Es un mundo perverso. Logran su fin cuando dañan prestigios o generan desconfianzas o enconos hacia adentro, fracturando lealtades y debilitando la amistad. Cuando más ruido consigan, más basura podrán vender
Creo que el mejor cine, la mejor música y a mejor literatura vienen de Europa. Pero es muy difícil posicionarlo porque el mercado está lleno de basura de mierda, lo cual indica que las expectativas de la audiencia son bajas.
El ajedrez es el más grande desperdicio de la inteligencia humana después de la publicidad.
Tan corta como es la vida, aún la acortamos más por el insensato desperdicio del tiempo.
Es curioso -dice Luder- En el fondo de los ojos de las personas extremadamente bellas hay siempre un remanente de imbecibilidad.
Uno mismo hace el mal, uno mismo lo sufre; uno mismo se aparta del mal, uno mismo se purifica. Pureza e impureza son cosas de uno mismo, nadie puede purificar a otro
En todo placer y goce de la vida hay algo ficticio, como un esfuerzo o propósito personal para conseguir que aquello nos dé de veras satisfacción. Esta es la impureza del placer y, al mismo tiempo, una ley de vida.
Ya sé que no somos ni podemos ser iguales, pero opino que quien juzga imprescindible distanciarse del así llamado populacho para mantener su respeto, es tan reprobable como el cobarde que se esconde del enemigo por temor a sucumbir.
El populacho puede silbarme, pero cuando voy a mi casa y pienso en mi dinero me aplaudo a mí mismo.
Fuente de alegría es la vida. Mas donde la chusma va a beber con los demás, todos los pozos quedan envenenados.
Asumí el control del merchandising no porque pensara que iba a hacerme rico, sino porque deseaba controlarlo. Deseaba ser un soporte por cuestiones sociales, seguridad, y razones de calidad. No quería que alguien usara el nombre de Star Wars en una pieza de chatarra
Un trasiego de tópicos, de alegre trapicheo con palabras vacías de sentido, de chatarra retórica sin hueso argumental ha acabado por vetar los debates sobre los problemas de los ciudadanos, los de ahora y los que han de llegar. Esa vaguedad no guarda ninguna relación con la inevitable abstracción de los principios, de los ideales.