Del maldiciente al malhechor sólo media la ocasión
En España la forma mejor de asegurarse una larga estancia en prisión en estos momentos es ingresar en ETA, con una particularidad: que desde el día en que un malhechor de ETA pone la bomba hasta el día que ingresa en la cárcel cada vez pasa, cada vez transcurre menos tiempo.
Pido a las generaciones futuras que algún día reivindiquen mi nombre, ya que muero como un bandido en tierra extraña.
El gangster Lucky Luciano lo dejó dicho: en cualquier negocio lo primero que hay que procurar es no ser el muerto.
Un político, que extermina hombres para ascender, es considerado, según su éxito, como un facineroso o como un héroe.