¿Qué espíritu es tan vacío y ciego que no puede reparar en el hecho de que el pie humano es más noble que el zapato y que la piel humana es más hermosa que la prenda con la que se cubre?
La roca que ha de servir de fundamento a una congregación es la pobreza y las contradicciones. Ahora bien, a Dios gracias, tenemos abundancia de ambas cosas: todo lo cual me da pie para creer que edificamos con solidez y que Dios nos ha de bendecir.