El movimiento social, directa o indirectamente, es siempre determinado por acción o reacción de la mujer, por impulso visible o invisible de mujer, por influencia buena o mala de mujer
La Corona, en la persona del Rey don Juan Carlos, ha aportado a la vez estabilidad e impulso reformador, apertura al futuro y representación de la continuidad histórica del España, confianza y responsabilidad
La dedicación perpetua que un hombre le da a su negocio, debe ser sostenida con una negligencia perpetua hacia muchas otras cosas.
Yo no tengo ídolos. Tengo admiración por el trabajo, la dedicación y la competencia.
... Esdras vemos que éste se esmeró no sólo en investigar la ley de Dios, sino también en embellecerla;...
Jaime, mi padre, antes de calmarse y abrir su tienda Casa Ukrania, había trabajado como artista de circo. (...) Podría pensarse que en mi infancia fui más influido por Jaime que por Sara, mi madre. Sin embargo, no es así. Si la severidad era la base de la educación que yo debía recibir, por ser hombre y no mujer, mi madre se esmeró en aplicarla.
Los pueblos, los hombres se enfrían por ausencia de espíritu. Pero estamos nosotros, con pedernal y yesca, con melodías y cantares, poemas y reflexiones, alto desvelo y sueños de todo tipo, para entibiar las horas de aquellos que no quieren congelarse todavía.
Vuélvete rosa desnuda al carmen rosa del cielo. La forma de mi desvelo frente a tu sonrisa duda.
Lo que más estorba para adquirir un buen amigo es nuestro empeño de tener muchos.
El ideal de una persona no servirá para otra. Quien abrigue un ideal que no pueda alcanzar, se sentirá decepcionado. Deberías tener tu propio ideal. Puedes alcanzarlo ahora o dentro de diez años. No importa demasiado. Todo el mundo debiera tratar con su mejor empeño de vivir de acuerdo con este ideal. Toda tu energía, fuerza nerviosa y voluntad han de ser puestas al servicio de este ideal.
Le quedaban por conocer muchas noches en las que sucumbiría a mujeres que su avidez y el alcohol le harían juzgar deseables, para llevarse las manos a la cabeza al descubrir que se había metido en la cama con descomedidas parientes de Oliver Hardy o con casquivanas émulas de Bela Lugosi.
Sed, cristianos, a moveros más formales: no seáis como pluma al viento, y no creáis que cualquier agua os lave. Tenéis el viejo y el nuevo testamento, y el pastor de la Iglesia que os guía: que ello a vuestra salvación os baste. Si mala avidez otra cosa os grita, sed hombres, y no locas ovejas, ¡que el judío, de vosotros, entre vosotros, no se ría!