Todo cruzamiento de razas provoca tarde o temprano la decadencia del producto híbrido, mientras el elemento superior del cruzamiento sobreviva en puridad racial. Cuando se ha bastardeado hasta el último vestigio de la unidad racial superior, es cuando desaparece para el producto híbrido el peligro de extinción
En Cataluña todo elemento procedente del resto de España lo catalanizan, y les place a sus naturales que hasta los municipales aragoneses y castellanos de Barcelona hablen catalán; aquí padecemos muy mucho cuando vemos la firma de un Pérez al pie de unos versos euzkericos, u oímos hablar nuestra lengua a un cochero riojano, a un liencero pasiego o a un gitano.
El hecho de que la materia de una ciencia este organizado demuestra que ha estado sometido a la inteligencia, que ha sido metodizado (... ). El método significa aquella organización de la materia de estudio que la hace más eficaz en el uso.
Con la realidad española, que es materia de legislación, ocurre algo semejante a lo que pasa con el lenguaje; el idioma es antes que la gramática y la filología y los españoles nunca nos hemos quedado mudos a lo largo de nuestra historia, esperando a que vengan a decirnos cuál sea el modo correcto de hablar o cuál es nuestro genio idiomático.
El Estado, al igual que el suelo sobre el que se halla situado, no es un patrimonio. Consiste en una sociedad de hombres sobre los cuales únicamente el Estado tiene derecho a mandar y disponer. Es un tronco que tiene sus propias raíces.
Escóndeme que el mundo no me adivine. Escóndeme como el tronco su resina, y que yo te perfume en la sombra, como la gota de goma, y que te suavice con ella, y los demás no sepan de dónde viene tu dulzura
De noche bajo la luna torso desnudo el caracol.
El tronco estaba dividido por la cintura. La parte superior del torso yacía con los brazos doblados en los codos, con las manos colocadas hacia adentro y descansando en el estómago. Era una posición adecuada para un ataúd, salvo que los dedos no se entrelazaban.
Vi al ángel en el mármol y tallé hasta que lo dejé en libertad
Vi el ángel en el mármol y tallé hasta que lo puse en libertad.
...la composición se disuelve, la complexión se cambia, la figura se muda, el ser se altera, la fortuna varía, permaneciendo siempre los elementos lo que son en sustancia y perseverando el principio material único (que es la verdadera sustancia de las cosas, eterna, ingenerable, incorruptible) en aquello mismo que fue siempre.
La figura moral de Judas es un misterio sordo, sin ecos, tan profundo como el silencio de los siglos y tan amargo como su triste sombra de condenado para la eternidad.
Sofía.-..., los que son o se tienen por príncipes mayores, para mostrar con señales manifiestas esa su potestad y divina preeminencia sobre los demás, se ciñen la cabeza con la corona, la cual no es otra cosa que una figura de muchos cuernos que lo coronan en círculo, id est, le coronan la cabeza.
El artista debe ser ciego frente a la forma reconocida o no, del mismo modo que debe ser sordo a las enseñanzas y los deseos de su tiempo.
Ya hemos llegado al punto de considerar nuestros bienes como artículos desechables. ¿Hemos transformado de igual modo la forma de ver a nuestros semejantes? ¿Hemos dejado de valorar también, durante este proceso, la singularidad que poseemos todos?
El amor físico es un instinto natural, como el hambre y la sed; pero la permanencia del amor no es un instinto.
Todo acto de fuerza física o verbal, coerción o privación amenazadora para la vida, dirigida al individuo mujer o niña, que cause daño físico o psicológico, humillación o privación arbitraria de la libertad y que perpetúe la subordinación femenina
También me mostró una puerta oculta en un lado de la cámara en la que estaba recluido, que me enseñó cómo abrir y que conducía a un pasadizo, formado en el espesor de los muros, que se extendía a lo largo del castillo y salía por un rincón oscuro a la muralla del lado este.
Por el grosor del polvo en los libros de una biblioteca pública puede medirse la cultura de un pueblo.
Medirá unos 16 centímetros, y es como un colgajo que desciende hasta más abajo del mentón. Es de grosor parejo desde el comienzo al fin; en una palabra, una cosa larga, con aspecto de embutido, le cae desde el centro de la cara.
Habla suave y lleva un grueso bastón.
Hay un gran árbol; su tronco es tan grueso que sería muy difícil cortarlo. Ahí sigue al borde del camino. Los carpinteros que pasan por allí ni se dignan mirarle, pero muchos viajeros se cobijan bajo su enorme sombra. Así es el Sabio: de tan grande deviene en inútil, pero muchos se cobijan bajo sus palabras. ¿Por qué, entonces, va a ser perjudicial y malo no servir para nada?
Leí a Tiutschev, y, por primera vez en mi vida, escribí versos, ya no en forma esporádica sino a menudo y sistemáticamente, tal como se pinta o se compone música. Fue en la espesura de ese árbol donde, durante los dos o tres meses de verano, escribí los versos de mi primer libro.
Una oscura e inquieta castidad puso una flor para mí en el jardín más secreto en un horizonte de gracia y claridad intangible y próximo. Promesa estática en la luz de la luna de la densidad en mí corpórea no es la culpa, es la memoria de la primera mañana del pecado sin Eva y sin Adán. Sólo el fruto probado y la serpiente enroscada en mi soledad
Cualquier persona que alcance un horizonte de sucesos caería a un punto de densidad infinita y el final del tiempo.
La palabra nos revela la consistencia del espíritu.
Es en efecto cuando divulgo lo privado de mí mismo cuando más me expongo: no por el riesgo del escándalo, sino porque así presento mi imaginario en su consistencia más fuerte; y el imaginario es precisamente lo que ofrece un blanco a los otros, lo que no está protegido por ningún vuelco, ninguna dislocación.
A quince metros del cadáver ya no necesité guía alguno. Había detectado la inconfundible fetidez a muerte que se mezclaba con el peculiar olor arcilloso de los bosques. El olor a carne en descomposición no se asemeja a ningún otro y se percibía claramente en el ambiente cálido del atardecer, tenue pero innegable.
El 'buen hombre' es un cadáver mal informado.
No hay cosa más mediocre en el mundo que la posesión de una mujer, amigo mío; quien ha tenido una, ha tenido ciento: la única forma de alejar la monotonía de esos triunfos insípidos, es deberlos sólo a la astucia y únicamente sobre los restos de un tropel de prejuicios vencidos pueden encontrarse algunos encantos.
Las bacterias se reproducen en los restos humanos y de otros animales, hierbas y árboles prosperan sobre los nutrientes que liberan la actividad de las bacterias. Los insectos atacan a los árboles, la rana come los insectos. Animales, plantas, microorganismos...Todos son parte del ciclo de la vida. Manteniendo un equilibrio adecuado, éstos viven una existencia regulada por la naturaleza.
Si alguna corporación tiene legitimidad para llamarse academia es la de Televisión.
No se concibe nuestra victoria personal sin obtener por medio de ella al propio tiempo una victoria colectiva; nuestra ansia de dicha no puede satisfacerse sino con la dicha de todos, porque la sociedad anarquista, muy lejos de ser una corporación de privilegiados, es una comunidad de iguales, y será para todos una dicha inmensa, de la cual no podemos actualmente formarnos una idea.
Engels continuaba su razonamiento considerando este camino como necesario en un esfuerzo lento y perseverante para ganar a las ideas revolucionarias a la gran masa del pueblo, sin cuya intervención directa no era concebible la transformación completa de la organización social.
La felicidad de todos será el fin y el objetivo de cada parte de esa organización en toda la sociedad.
Y en efecto, tal como se hace en nuestros textos ordinarios de filosofía acerca de los seres divinos, frecuentemente se proclama en los argumentos sobre el tema que la divinidad, entidad primera y suprema, ha de ser totalmente inmutable:...
Cuando hay procedimientos y recursos que vuelven innecesaria la intervención mía, me someto a los recursos y procedimientos habituales. Hay una entidad que designa y que determina. No tiene sentido ningún tipo de expresión, en este caso mía, lo que designen me va a parecer bien y nos ajustaremos a eso.
La chica rara, cuyo reinado inauguró la heroína de Carmen Laforet, no sólo rechazaba la retórica idealización de sus labores predicada por la sección Femenina, sino que empezaba a convivir con una idea inquietante, difícil de encajar y de la que cada cual se defendía como podía: la de que no existe el amor de novela rosa.
Había hecho varias notas sobre el tema para la sección salud del noticiero y nunca me di cuenta que yo presentaba todos los síntomas, hasta que la Enfermedad se hizo evidente. Este cansancio físico se manifiesta dañando muchas funciones, y esto me hizo entender que tenemos límites y que no podemos pretender hacerlo todo.
He investigado la anatomía de las abejas en las diversas secciones de su cuerpo. Así, en el abdomen, que sigue a su cintura, se halla una vejiga clara. Si la abrimos y la probamos, veremos que contiene un líquido que sabe a miel finísima.
Luego todo se convirtió en una sucesion de hechos concretos o de nombres propios o de verbos o de capitulos de un manual de anatomia deshojado como una flor, interrelacionados caoticamente entre si.
Yo no peleé por difundir el cuarteto para llegar a esto de no poder salir a la calle. Yo peleé porque tenía que pelear por el cuarteto, por la música que hago y porque lo amo con toda mi vida, pero me gustaría que por intermedio de una cámara o algo así que, en serio, es muy feo que cuando uno está, que el poco tiempo que tengo para estar con las personas que quiero, me lo quiten
Va cayendo suciedad a la cámara subjetiva de la cámara del piloto finlandés Kimi Räikkönen
Empecé a los 14 años. Había unos pibes en el colegio que tocaban y eso me llamó la atención. Un día me compraron una criolla, un compañero me pasó las notas y así empecé. Mi primer eléctrica me la compré a los 15. Era una Faim 335 con distorsionador incorporado. Después tuve una Epiphone Genesis, una Squire, la Fender Strato Aniversario y ahora la Firebird Gibson y la S.G.
Si no se mantiene un cierto grado de zeteticismo* con respecto a las ideas, por seductoras que sean, sucumbiremos a la hipnosis, como sucumbí yo cuando me metieron en un colegio católico para que formaran las monjas
El totalitarismo moderno es al totalitarismo católico del siglo XII lo que el espíritu laico y francmasón al humanismo del Renacimiento. Con cada vaivén, la humanidad se degrada.
Si ustedes abrieran las puertas, yo saldría a la calle y tendrían esta cosa llamada Charlie Manson que han creado. Porque no me han visto. No realmente. Yo solo podría asesinar a toda la humanidad