Coloco relicarios de mi especie a tu talón mordiente, a tu pisada, y siempre a tu pisada me adelanto para que tu impasible pie desprecie todo el amor que hacia tu pie levanto
Fernando Alonso es el mejor de la parrilla, aunque él sabe perfectamente que el Renault es su talón de Aquiles. Pese a ello, en cualquier circunstancia, en cualquier circuito, intenta sacar todo lo mejor de su coche y demostrar todas sus cualidades
Los partidos políticos actúan como empresas para captar votos, se habla de privatizar los ejércitos y la ciudadanía como vehículo de acceso a una sociedad se entiende como la entrada a un club privado
El cine...Es extraño. La gente compra una entrada. Esa entrada es su puerta a una fantasía que tú creas para ellos. La tierra de la fantasía, eso es todo, y tú das vida a sus fantasías. Fantasías de amor, de odio o de lo que sea.
En Alcatraz pasé miedo sobre todo de noche. Cuando hice lo de Alcatraz me engañaron. Me dijeron que sólo había tiburones grises y luego vi desde un helicóptero cómo soltaban un trozo de carne y saltaban a por él tiburones blancos de varios metros.
Sé que me he vuelto a perder, que he vuelto a desenterrar todo aquello que pasé
En uno de aquellos días manifesté a mis amigos que si en Nicaragua hubieran cien hombres que la amaran tanto como yo, nuestra nación restauraría su soberanía absoluta. Mis amigos me contestaron que posiblemente habría en Nicaragua ese número de hombres, o más
No hay mejor manera de respetar al rival que meterle el máximo número de goles que puedas.
La butaca que giraba en el vagón panorámico volvió a su memoria. Era como si viera su propia soledad, que giraba y giraba dentro de su corazón.
Quapropter bono christiano, sive mathematici, sive quilibet impie divinantium, maxime dicentes vera, cavendi sunt, ne consortio daemoniorum animam deceptam, pacto quodam societatis irretiant. De Genesi ad Litteram II, XVII, 37.
El otro día bono se me acercó y me dijo: ¿Cómo andás, hijo?, No soy tu hijo, pedazo de imbécil.
Si por casualidad hay que, aún siendo ignorantes de todas las matemáticas, presumiendo de un juicio sobre ellas por algún pasaje de las escrituras, malignamente distorsionado de su sentido, se atrevieran a rechazar y atacar esta estructuración mía, no hago en absoluto caso de ellos, hasta el punto de que condenaré su juicio como temerario.
Me voy a la cama. Sé que tendré horribles pesadillas con enormes monstruos envueltos en togas académicas y blandiendo ensangrentados cuchillos de carnicero en cuyas hojas estarán grabadas las palabras Fragmento, Selección, pasaje y Abreviado.
Cuando yo era chico, y vivía en un barrio, la gran novedad o logro era tener un auto, y cuanto más lujoso era el auto más reconocimiento para la familia que lo había obtenido. Pero había una distinción para nosotros, el reconocimiento a la familia era en función de qué había hecho para conseguir ese auto. Había familias que trabajan padres e hijos y se compraban un Seat. Y había familias que se ganaban la lotería y se compraban un Mercedes Benz. Y nosotros valorábamos al que trabajaba mucho y se había comprado el Seat. Le doy ese ejemplo porque a partir de ahí aprendí que no se evalúa lo conseguido sino lo merecido. Primero hay que ver si el medio está de acuerdo con que se evalúe lo merecido y no lo conseguido, la respuesta es no.
La experiencia tiene la misma utilidad que un billete de lotería después del sorteo.