El uso indiscriminado de la violencia de uno y otro signo, sumió a los habitantes de la Nación en una atmósfera de inseguridad y de temor agobiante
Uno se da cuenta de que es desgraciado y miserable pobre y está ciego y desnudo, y con rostro de fantasma dolorido y amargado camina temblando por la pesadilla de la vida
El uso indiscriminado de la violencia de uno y otro signo, sumió a los habitantes de la Nación en una atmósfera de inseguridad y de temor agobiante
El espíritu angustiado por el futuro es calamitoso.
El hombre derrotado pierde el sentido de su libertad. El hombre angustiado que todos los días regresa a su hogar, a la mesa escaseada, y tiene que pronunciar palabras de queja frente a sus hijos, está maltratando el porvenir democrático de su país, porque está sembrando el desengaño en sus propios hijos.
Uno se da cuenta de que es desgraciado y miserable pobre y está ciego y desnudo, y con rostro de fantasma dolorido y amargado camina temblando por la pesadilla de la vida
La ofensa más atroz que se puede inferir al hombre es negarle que sufra
Es necesario señalar que las sociedades de consumo son las responsables fundamentales de la atroz destrucción del medio ambiente. Ellas nacieron de las antiguas metrópolis coloniales y de políticas imperiales que, a su vez, engendraron el atraso y la pobreza que hoy azotan a la inmensa mayoría de la humanidad.
El imperialismo, para los pueblos indígenas, ha sido el silencio. Es el que quisiéramos verdaderamente derrotar algún día, porque un pueblo silenciado es más doloroso que un pueblo que habla y no se escucha. No hay cosa más triste que el silencio como regla sobre los pueblos.
La experiencia es el primero de los filósofos, pero el más doloroso cuando hemos llegado a conocer bien su ciencia.
El arte que resiste inflexible es saboteado y condenado al ostracismo. Todo lo demás es desmontado, privado de su sentido y reconstruido de nuevo. El único criterio del procedimiento es alcanzar al consumidor en la forma más eficaz posible. El arte manipulado es el arte del consumidor.
Como consumidor de pintura creo que su gran rol es justamente aportar el espacio que puede ser inefable
Era el sueño de su vida súbitamente convertido en realidad, la riqueza y el lujo que siempre había deseado. Su ambición de fasto y poder era capaz de hacerla enfermar, era un instinto devorador que seguramente sólo la riqueza lograría apaciguar.
...el sacerdote es un devorador de beefsteak ('bistec'), el sacerdote había formulado de una vez por todas qué es lo que él quiere tener, qué es la voluntad de Dios.
El comerciante no vende su producto al consumidor, vende el consumidor a su producto. Mejora o simplifica su mercancía, sino que se degrada y simplifica al cliente.
La droga es el producto ideal...La mercancía definitiva. No hace falta literatura para vender. El cliente se arrastrará por una alcantarilla para suplicar que le vendan...El comerciante de droga no vende su producto al consumidor, vende el consumidor a su producto. No mejora ni simplifica su mercancía. Degrada y simplifica al cliente
El imperialismo, para los pueblos indígenas, ha sido el silencio. Es el que quisiéramos verdaderamente derrotar algún día, porque un pueblo silenciado es más doloroso que un pueblo que habla y no se escucha. No hay cosa más triste que el silencio como regla sobre los pueblos.
Es inútil decir que no deberíamos querer la seguridad. Hemos de descubrir que no existe la seguridad, que buscarla es doloroso y que cuando imaginamos haberla encontrado, no nos gusta. Lo principal es comprender que no hay ninguna seguridad.
Para quien se siente solidario con el destino de este mundo, el choque de las civilizaciones le resulta angustioso
Cuán triste, largo y cansado, cuán angustioso camino, señala el Ente divino al infeliz desterrado.
Dulce es al hombre en su penoso duelo, cuando el tormento pertinaz le aterra, decir burlando a la mezquina tierra: Allí es mi patria, y señalar el cielo.
Nunca fui orgulloso o interesado y siempre estuve satisfecho con el puesto en el país en el que vivo y al que amo, nunca he buscado ni deseado otro puesto, pero ahora me es penoso estar aquí ocioso y no poder hacer nada por la patria acosada.
Afuera no hay canto de pájaros, y dentro un silencio sofocante se cierne sobre todos y todas las cosas, y parece arrastrarme hacia un abismo.
El brasileño no está preparado para ser 'el más grande del mundo' en cosa alguna. Ser 'el más grande del mundo' en cualquier cosa, aunque sea en escupido en distancia, implica una grave, pesada y sofocante responsabilidad.
Es desolador que algunas cosas no cambien nunca en esencia, aunque también es reconfortante que algo persista, que no se mueva ni un milímetro ni un vocablo.
El oportunismo político ya se da en la Constitución de Cádiz. Es desolador ver cómo el español repite los errores, cómo se carga lo que se le ponga delante