¡Y esos ojos! Contemplarlos es como sumergir la mirada en algo profundo, angustiosamente abisal. Con su brillante negrura, esos ojos parecen no decir nada y expresar, a la vez, lo inexpresable, a tal punto resultan conocidos y desconocidos al mismo tiempo.
No te puedes sumergir dos veces en el mismo río.
Flirtear es el arte de hacer caer a una mujer en tus brazos sin caer tú en sus manos.
El autentico borracho se complace en sumergirse poco a poco en el entorpecimiento
Era difícil sumergirse de pronto en el enigmático lenguaje marxista; se diría que hablaban un idioma cifrado.
Cosas quiero, como una gran ola de ternura deshaciéndome un ruido de caracol, un cardumen de peces en la boca, algo de eso frágil y desnudo, como una flor a punto de entregarse a la primera luz de la mañana, o simplemente una semilla, un árbol, un poco de hierba.
Se hace santo el que quiere entregarse de veras a amar a Cristo como Él quiere ser amado.
La plegaria no es verbal. Proviene del corazón. sumirse en el corazón es plegaria, es la gracia.
El sujeto ha de pensarse como único fundamento, abstraerse del ente libre exterior y atribuirse a sí solo su actividad.
Vivir es asombrarse de estar en el mundo, sentirse extraño, llenarse de angustia ante la contingencia de dejar de ser, comprender la constante probabilidad de extraviarse, la necesidad de hacer amigos entre nuestros con seres, la contingencia de que sean enemigos, y estar alerta a lo genuino y a lo espurreo, a la verdad y al error.
La mayoría de conjuntos de valores darían lugar a universos que, a pesar de poder ser muy bellos, no contendrían a nadie capaz de asombrarse de esa belleza
Lo mejor que uno puede hacer es sorprenderse a sí mismo.
Creo que la gente pierde la capacidad de sorprenderse porque diariamente presencia desastres que suceden en todos lados.
Hay un sentido de divertirse y maravillarse todo el tiempo, uno que nunca debe irse.
El que no posee el don de maravillarse ni de entusiasmarse más le valdría estar muerto, porque sus ojos están cerrados.
Querrá sepultar la cara entre sus manos y llorar y gemir rogando una piedad que sabe que no existe
Es propio de un espíritu fuerte profundizar los asuntos que trata, y no dejarse sorprender por las apariencias.
¿Cómo se mejora un argumento? Mejorar o espesar un argumento consiste en crearle complicaciones al héroe o quizás a sus enemigos. Estas complicaciones tienen efecto cuando cobran forma de acontecimientos inesperados. Si el escritor es capaz de espesar el argumento y sorprender al lector, lógicamente, la trama mejora.