No deja de sentirse en el alma turbada tu benigna influencia; y tal vez en la entraña marmórea de la tierra, donde sufren tormento espíritus que lloran gracia y bondad perdidas, tus murmullos apagan su angustia ya los tuyos mezclan sus dulces cantos.
El poeta ve algunas cosas que no ven las otras personas o que el trabajo no permite observar, además ha aprendido una técnica para decir esas cosas de una manera no sólo eficiente sino de una manera entrañable, por lo tanto la sociedad tiene que ver muchísimo con la entraña del poeta.
El cerebro es mi segundo órgano en importancia.
La juventud está ante un límite histórico. Ignorar este límite es buscar la aniquilación. Estas masas juveniles, portadoras del mensaje de revolución deben encontrar en las J.O.N.S. el órgano político a través del cual canalizar sus ansias de revolución nacional.