La ciencia, casi desde sus inicios, ha sido realmente de carácter internacional. Los prejuicios nacionales desaparecen por completo en la búsqueda de la verdad del científico. La medicina también hace caso omiso de las fronteras nacionales
Hemos caminado a ciegas, haciendo caso omiso de las lecciones del pasado, con las trágicas consecuencias de las dos guerras mundiales.