La fe es el término medio entre la ligereza con que alguno precipitadamente cree y la pertinacia en no creer sino en lo que antes se demuestra por la razón.
Es curioso que las personas hablen tan ligeramente del futuro, como si lo tuviesen en la mano, como se estuviera en su poder apartarlo o aproximarlo de acuerdo con las conveniencias y necesidades de cada momento.
Mar adentro, pequeñas olas, silenciosas y regulares, iban y venían, como si alguien sacudiera ligeramente una sábana.
Los grandes espíritus siempre han encontrado violenta oposición de parte de los mediocres. Estos últimos no pueden entender cuando un hombre no sucumbe impensadamente a prejuicios hereditarios sino que, honestamente y con coraje, usa su inteligencia
Si tu plan no contiene una estrategia de retirada o posterior al ataque, sino que confías exclusivamente en la fuerza de tus soldados, y tomas a la ligera a tus adversarios sin valorar su condición, con toda seguridad caerás prisionero.
No pensaba alegremente acerca del progreso de la humanidad, y veía tan sólo en el creciente acopio de civilización una necia acumulación que debía inevitablemente venirse abajo al final y destrozar a sus artífices.
El sabio no se sienta para lamentarse, sino que se pone alegremente a su tarea de reparar el daño hecho.