Pero hasta tanto que llegue ese momento amenazador nuestro héroe no desea nada, porque está por encima del deseo, porque está saciado, porque es artista de su propia vida y se forja cada hora según su propia voluntad.
Muéstrame un jugador y yo te mostraré un perdedor, muéstrame un héroe y te mostraré un cadáver.
El lector puede ser considerado el personaje principal de la novela, en igualdad con el autor; sin él, no se hace nada.
He creado una heroína (Chihiro) que es una chica corriente, alguien con quien el público puede simpatizar. No es una historia en la que los personajes crecen, sino una historia en la que pueden sacar lo que llevan dentro, debido a las circunstancias particulares. Quiero que mis jóvenes amigos vivan así y creo que ellos, al igual que yo, tienen ese deseo
La chica rara, cuyo reinado inauguró la heroína de Carmen Laforet, no sólo rechazaba la retórica idealización de sus labores predicada por la Sección Femenina, sino que empezaba a convivir con una idea inquietante, difícil de encajar y de la que cada cual se defendía como podía: la de que no existe el amor de novela rosa.
Llorando la ausencia del galán traidor la halla la luna y la deja el sol, añadiendo siempre pasión a pasión, memoria a memoria, dolor a dolor.
SOPAS, no hay nadie..pero timbraron ¿sera el doctor Galan que vino a jalarle las patas a toda la clientela del edificio?