General: Chile no olvidará jamás el nombre del ilustre Inválido que el día de hoy se presentó herido en el campo de batalla.
Soy poeta. Con tres años, ya era capaz de asombrar a cuantos eran testigos de la elocuencia con que manejaba nuestro ilustre idioma. Aprendí a leer y a escribir. Memoricé a los grandes, a los mediocres y a los muy malos. He ganado más guerras de poesía en los países sirios que cualquier otro contendiente.
En el campo -seguía pensando-, los dioses se acercan a los hombres, uno es algo y vive su vida; no obstante, en la ciudad, donde tienen lugar miles de acontecimientos más, nadie es ya capaz de relacionarse con ellos: así comienza la célebre abstracción de la vida.
Siempre has dicho que no puedes vivir sin música: ¿Quién cantará para ti, quién tocará para ti? Los pájaros, en el jardín; el mar, en torno mío. ¡Escucha! Oye ese maravilloso mezzo-soprano: es la oropéndola. ¿No es más bella su voz que la de nuestra célebre compatriota Cristina Nilson o la de la misma Patti? Oye el solemne andante de las ondas: ¿No es más bello que el de la Novena Sinfonía?
La corrupción de lo egregio es la peor de las corrupciones.
Un prominente educador me dice que los cuentos de hadas son de valor incalculable en el desarrollo de la imaginación en los jóvenes. Yo lo creo.
Cada hombre prominente en la actualidad tiene sus discípulos, y siempre hay un Judas que escribe la biografía.
Al buscar lo imposible el hombre siempre ha realizado y reconocido lo posible. Y aquellos que sabiamente se han limitado a lo que creían posible, jamás han dado un solo paso adelante
Cuando yo empecé el cómics era todavía un nicho por explorar, la gente se escondía para leerlo. Hoy día ya es parte importante de la cultura pop, se encuentra reconocido y se lo aprecia de manera universal.
Yo quería ser famoso de todas maneras. Lo único que quería era eso. Tocar en un grupo, dejar la cagá, tocar para ene gente. Eso quería. Lo sigo queriendo. Yo creo que algún día lo voy a conseguir
Esta será mi venganza: Que un día llegue a tus manos el libro de un poeta famoso y leas estas líneas que el autor escribió para ti y tú no lo sepas
No hay ningún general que no crea tener los mismos derechos al trono que yo. No hay ningún hombre influyente que no crea haber dirigido mi marcha el 18 de Brumario. Estoy obligado, pues, a ser muy severo con estos hombres. Si me familiarizase con ellos no tardarían en repartirse mi poder y el tesoro público. No me quieren, pero me temen, y eso es suficiente.
No nos habría sido posible conquistar el poder o utilizarlo como lo hemos hecho sin la radio. La radio es el intermediario más influyente e importante entre un movimiento espiritual y la nación, entre la idea y el pueblo.
Mi ideal político es el democrático. Cada uno debe ser respetado como persona y nadie debe ser divinizado
¿Por qué, al hablar del futuro, emplea Karl Marx el presente?, pregunta con aire triunfante nuestro filósofo. Puede usted, muy respetado crítico, mirar en cualquier gramática y verá que el presente se usa en lugar del futuro cuando este futuro es tenido por algo inevitable e indudable.
Tengo edad suficiente para recordar pero, al igual que otros, repito las palabras que son socialmente aceptables, porque no me siento autorizado a revelar una verdad que resulta demasiado cruel para el corazón humano.
¡Qué novato es quien se figura que mostrar espíritu e inteligencia es un medio de hacerse querer en sociedad! Antes bien, tales cualidades excitan en la preponderante mayoría de la gente un odio y un rencor que resultan tanto más amargos cuanto que quien los siente no está autorizado a denunciar la causa que los origina e incluso la disimula ante sí mismo
A los que tienen un sentimiento cristiano les corresponde un papel de vigías. Dios nos ha nombrado vigías, también a los políticos
Y no habléis demasiado pronto, pues la ruleta todavía está girando y no ha nombrado quién es el elegido, porque el perdedor ahora será el ganador más tarde porque los tiempos están cambiando.
Doy gracias por haber sobrevivido. Por haber conocido la desgracia. Por haber dejado de ser el que fui. No quiero olvidar el común destino de los hombres ni reclamar para mí una suerte especial. Quiero encontrar el camino de la justicia y librarme de lo superfluo y no conservar sino lo que merezca ser conservado. Quiero utilizar mi cólera y tener esa fuerza que sólo da el silencio.
Quisiera ser leído por una minoria y ser conocido por la mayoria*
Es una suerte que la sociedad libre sea más productiva, porque de no haberlo sido jamás se habría tolerado. El prejuicio en su contra es tan poderoso que es necesario tener una ventaja de cinco a uno para vencerlo.
Si utilizas al enemigo para derrotar al enemigo, serás poderoso en cualquier lugar a donde vayas.
¡Qué novato es quien se figura que mostrar espíritu e inteligencia es un medio de hacerse querer en sociedad! Antes bien, tales cualidades excitan en la preponderante mayoría de la gente un odio y un rencor que resultan tanto más amargos cuanto que quien los siente no está autorizado a denunciar la causa que los origina e incluso la disimula ante sí mismo
Sólo puede entenderse la sociedad mediante el estudio de los mensajes y de las facilidades de comunicación de que ella dispone y, demás, que, en el futuro, desempeñaran un papel cada vez más preponderante los mensajes cursados entre hombres y máquinas, entre maquinas y hombres y entre maquina y maquina
Nosotros los humanos, somos una manifestación extremadamente importante de la bomba de replicación, porque es a través nuestro, a través de nuestros cerebros, de nuestra cultura simbólica y de nuestra tecnología, que la explosión podrá alcanzar el siguiente paso y reverberar por el espacio profundo.
Somos la banda más importante de este país. ¿La mejor del mundo? Oh, si. Para mi, yo soy el mejor compositor del mundo. Por lo menos estoy a la altura de Neil Young. Y U2. Y Paul Weller. Esta es la gente a la que respeto.
Morir es la consecuencia de la vida y de nosotros depende que cuando lleguemos a ese momento lo dejado atrás sea lo suficientemente relevante como para dignificar la memoria que leguemos a nuestros sucesores
Estoy convencida de que el compromiso de los miembros y miembras de esta comisión será muy relevante a la hora de conseguir los objetivos que la sociedad española nos está reclamando.
Dudo de que haya siquiera un actor importante por cada generación que pasa a la historia. Por eso hay que ver a la actuación como lo que es: una cosa efímera, un conjunto de errores.
Aunque ser mujer no me impide escribir, creo que vale la pena partir de una lucidez exasperada. De este modo, afirmo que haber nacido mujer es una desgracia, como lo es ser judío, ser pobre, ser negro, ser homosexual, ser poeta, ser argentino, etc. Claro es que lo importante es aquello que hacemos con nuestras desgracias.