Seguir ciegamente no es correcto, para seguir a alguien bien debes anteponer tu voluntad.
Debes estimar como cosa torpísima el anteponer la vida al honor, y por salvar la vida perder la razón de vivir
No te aflijas, sino alégrate de preferir ser, aún siendo miserable.
Si tuviera que decidir si debemos tener un gobierno sin periódicos o periódicos sin gobierno, no dudaría en preferir lo segundo.