Las pasiones son los únicos oradores que siempre persuaden. Son como un arte de la naturaleza cuyas reglas son infalibles; y el hombre más romo cuando le domina la pasión persuade mejor que el más elocuente que carece de ella.
El día que me sienta mal no me pongo en manos de nadie. Me boto yo mismo en el cajón de la basura. Esta frase es de El coronel no tiene quien le escriba.
Nunca, en el largo curso de la historia, despertó nación alguna tan gloriosamente después de tan torpe y pesado sueño como España en 1808
Si mis versos os siguen con admiración y aspiran a eternizar este recuerdo del ser a quien amo, es que mis alas son las palabras, y sin ellas caigo desvanecido en un torpe sueño.
Su voz, semejante al principio al chasquido de los arbustos, tardó en volverse real mediante metamorfosis que mi tronco parecía acompañar, alargándose y reduciéndose con un murmurar de vértebras.
El hombre noble debe ser tardo en el hablar y rápido en el obrar.
Creo que el iPhone está más limitado por la relación con la mano y el oído (la ergonomía exige una la relación de distancia), y no tiene una relación tan interesante como la que existe entre la mano y el ojo que si se da en el iPad.
Al buscar lo imposible el hombre siempre ha realizado y reconocido lo posible. Y aquellos que sabiamente se han limitado a lo que creían posible, jamás han dado un solo paso adelante
La política de De La Sota es tan pendular que pasó de un menemismo ortodoxo al kirchnerismo bobo en un solo acto.
Para mí, la vida sigue siendo tocar la batería, pero me divierte hacer películas. Las veces anteriores fui usado (yo me presté a eso, lo acepto) por lo atractivo de mi nombre. Me decían: actúa naturalmente, sé tú mismo. Y allí salía yo, haciendo las morisquetas que todo el mundo esperaba de Ringo, el bobo de los Beatles
Como el valor total de la producción se divide entre los capitalistas y los trabajadores o se paga en forma de impuestos, el valor del producto nacional bruto del lado de impuestos será igual a las ganancias brutas después del pago de impuestos, más los salarios y sueldos después de cubrir los impuestos, más todos los impuestos directos e indirectos.
No hay peor cosa que un bruto con inquietudes
Sobre el fino garabato de un tango nervioso y lerdo se irá borrando el recuerdo...
Sé lento en adquirir amistades, pero sé constante en retenerlas una vez admitidas.
Soy la pesadilla de quienes quieren raperos borregos, el duelo del pueblo por presos a los que quiero, incorruptible cual bolchevique furioso, no puedo estar triste por la escoria que no soy. Me tatuaron en la boca kale borroka, mis ilusiones con la decadencia global chocan; el capitalismo está tan metido en las mentes, que será un proceso lento desgraciadamente
FÍGARO- Ya está nuestro imbécil con sus viejos refranes. Y bien, pedante, ¿qué dice la sabiduría popular? Tanto va el cántaro a la fuente que al final...
Cuando al imbécil le mostraron la luna, solo supo ver el dedo de quien se la señaló. Yo no soy quién para subrayar que es cierto, pero quien dijo esto, lo dijo con la mejor intención.
El busca porque realmente quiere saber. Él sabe que no sabe, por eso busca. Su búsqueda tiene su belleza propia. El no es tonto, simplemente ignorante. El verdadero tonto es aquel que piensa que sabe sin saber en absoluto.
También el tonto tiene a veces inteligentes pensamientos, solo que no se entera.
El hecho de que una persona de nuestra predilección se enamore perdidamente de alguien a quien consideramos un memo integral, nos induce a analizar tanto los motivos del amor como los de la predilección.
Detrás de todo lo que deseamos, siempre aparece algo siniestro, oculto tras un tupido velo.
Preguntándole qué fue lo más embarazoso que le ha ocurrido en el mundo del cine Yo recuerdo que estaba haciendo una escena de lucha con espada y olvidé que estaba en un set cerrado en el que estaba mucha gente, así que le dí un puñetazo en la cara a un hombre adulto por accidente, ¡fue muy embarazoso! Quiero decir que fue muy doloroso en ese momento
Un pensamiento no paradójico me resulta casi insoportable, un pensamiento cerrado en sí mismo, coherente, que no admite la paradoja.
¿Quién es libre? El sabio que puede dominar sus pasiones, que no teme a la necesidad, a la muerte ni a las cadenas, que refrena firmemente sus apetitos y desprecia los honores del mundo, que confía exclusivamente en sí mismo y que ha redondeado y pulido las aristas de su carácter.