Saber escuchar es el mejor remedio contra la soledad, la locuacidad y la laringitis.
El silencio es el signo de la sabiduría y la locuacidad es señal de la estupidez
La elocuencia de corto alcance es naturalmente la del pueblo y la de los niños, y admite expresiones ricas, más ricas incluso que la otra.
La elocuencia debe venir de la emoción, pues toda emoción la da naturalmente.
Estas palabras son mías, de la afluencia de mi corazón: Te quiero, te quiero, te quiero, te quiero.
La belleza ha terminado por recurrir a la verborrea El color prohibido, 1951
Si soy la lengua sucia tu eres la palabra debil, si soy la causa de tu rabia en esta labia fértil
Dar es el verbo más corto de la primera conjugación, y no dar es el más barato.
Entre las marcas y las palabras no existe la diferencia de la observación y la autoridad aceptada, o de lo verificable y la tradición. Por doquier existe un mismo juego, el del signo y lo similar y por ello la naturaleza y el verbo pueden entrecruzarse infinitamente, formando, para quien sabe leer, un gran texto único.
Se mueven en una paradoja extraña, decididos a ser indecisos, resueltos a la irresolución, firmes en dar tumbos, graníticos en la fluidez e importantes con todo su poder. Se está acabando la época del dejar las cosas para más tarde, de las decisiones a medias, de los expedientes tranquilizadores y desconcertantes y de las dilaciones. Ahora ingresamos en un periodo de consecuencias.
Quiero que la vida de Lila sea diferente a la mia. El español es un idioma muy importante, y si comienza a estudiarlo desde ahora, lo hablara con fluidez en su adolescencia.