¡Tú más aún: tú como tú, sin palabras toda singular, desnudez única, tú, sola!
Nunca podrás tenerme sin abrir tu deseo sobre la desnudez que sella lo inefable, ni encontrarás mis labios mientras algo concreto enraíce tu amor.
No hay ninguna desnudez comparable a lo que uno siente cuando está desnudo ante alguien por primera vez.
Entre el mar -a donde nunca fui- y el viento que corre desnudo en las montañas, emplumado de palabras invento mi camino.