La felicidad es un viaje prosiguió Julián, hablando otra vez con pasión. Es también una elección que tú debes hacer. Puedes maravillarte de los diamantes que hay en el camino o puedes seguir corriendo toda tu vida, persiguiendo ese cofre del tesoro que a la postre resulta estar vacío. Disfruta esos momentos que cada día te ofrece, porque hoy es lo único que tienes.
Al fin y a la postre el hombre no debe contar sino consigo mismo.
Mi generosidad finalmente cede a su odio.
Me reprochan aún muchas más cosas, y finalmente mostrar en mis cuadros objetos situados allí donde nunca los encontraríamos. Sin embargo, se trata de la realización de un deseo real, aunque no sea consciente para la mayoría de los hombres.