Pues es imposible o no es fácil hacer el bien cuando se está desprovisto de recursos.
Contemplando desde la ventana la fantasía de luz y color del resplandeciente mundo en que me desenvuelvo, totalmente desprovisto de ternura y de quietud, siento un repentino anhelo de paz, de comprensión.
Cuando el placer del amor nos abandona definitivamente, sabemos que nuestro pobre cuerpo se ha hecho del todo candidato a la muerte.
Una persona pobre e infeliz está en mejores condiciones que una rica e infeliz, debido a que la persona pobre tiene la esperanza todavía de pensar que el dinero ayuda.
La nobleza del plebeyo consiste en no avergonzarse del nombre de su padre.
La necesidad, al menesteroso le obliga al ser mentiroso.
Es preciso fijar perspectivas en las que el mundo aparezca trastrocado, enajenado, mostrando sus grietas y desgarros, menesteroso y deforme en el grado en que aparece bajo la luz mesiánica. Situarse en tales perspectivas sin arbitrariedad ni violencia, desde el contacto con los objetos, sólo le es dado al pensamiento.