Cuando no hay razones raciales o de naturaleza cultural que nos fuercen a dotar de autonomía a un grupo de poblaciones cualquiera, si se les da sin causa, bien pronto crecen intereses minúsculos y bastardos que van separando unas provincias de otras...
Ya sé que el grupo de jóvenes que se manifiesta no representa a toda la juventud y que un centenar de alborotadores por la calle causan más ruido que diez mil trabajadores que se quedan en su casa.
La verdad es que estamos gobernados por una pandilla de gilipollas
La raza, eso que tú llamas así, es solamente esa gran pandilla de gente mísera como yo, legañosos, pulgosos, ateridos, que han acabado aquí perseguidos por el hambre, la peste, los tumores y el frío, llegados tras ser vencidos de los demás rincones del mundo. No podían ir más lejos por el mar. Pues eso es nuestra nación y esos son nuestros compatriotas.
Podría creer en Dios, y Él podría haberme dicho en un sueño que el VIH produce SIDA. Pero yo no me pondría delante de un grupo de científicos para decirles:
El fútbol necesita que el jugador tenga una alta autoestima, pero la autoestima lleva a la vanidad y la vanidad te hace egoísta. El entrenador debe aprender a controlar eso dentro de un grupo y encontrar un balance.
Los servicios con mayor ancho de banda que el servicio telefónico común se denominan en ocasiones como de banda ancha, aunque en realidad el término es más un concepto de marketing que un concepto técnico específico.
Soy el mejor cantante del mundo, y Oasis es la mejor banda en el jodido planeta. Es un hecho, y a mí me encanta.
La educación es algo admirable, sin embargo, es bueno recordar, que nada que valga la pena se puede enseñar.
No es que pueda vivir, es que quiero. Es que yo quiero. La vieja carne al fin, por vieja que sea. Porque si la memoria existiera fuera de la carne no sería memoria porque no sabría de qué se acuerda y así cuando ella dejó de ser, la mitad de la memoria dejó de ser y si yo dejara de ser todo el recuerdo dejaría de ser. Sí, pensó. Entre la pena y la nada elijo la pena.
La falange me gusta bastante poco y rechazo de plano cualquier cosa que pueda plantear, pero la Constitución y el derecho de manifestación están por encima de que a mi me guste o no me guste la ideología de los convocantes, que no me gusta absolutamente nada.
La palabra anarquía, que implica la negación del orden actual e invoca el recuerdo de los más bellos momentos de la vida de los pueblos, ¿no está bien elegida para calificar a una falange de hombres que va a la conquista de un porvenir de libertad y amor para nuestra especie?
La literatura es siempre una expedición a la verdad.