No es nada evidente que lo sobrenatural haga el mundo más cómodo. Por el contrario, un mundo religioso es con frecuencia más aterrador que un mundo sin religión
El autor es quien da al inquietante lenguaje de la ficción sus unidades, sus nudos de coherencia, su inserción en lo real.
La filosofía me pone de los nervios. Si analizamos el fundamento último de todo, entonces todo cae finalmente en la nada. Pero he decidido retomar mis clases de nuevo y mirar a la Hidra de la duda directamente a los ojos, y ello es bastante inquietante si se evalúan los valores de uno mismo
Desafío es mantenerse altivo y desafiante ante la adversidad y agradecido ante la victoria; no se tiene rivales a quien vencer, pues se está convencido que para triunfar no se requiere derrotar a otro, su máxima victoria es la conquista de sí mismo;
Memoria selectiva para recordar lo bueno, prudencia lógica para no arruinar el presente, y optimismo desafiante para encarar el futuro.
Alonso es el mejor piloto que hay actualmente en la fórmula 1. No hay otro como él. Es mejor que Vettel, que Hamilton y que cualquiera de los demás. Es rápido, tiene cerebro y experiencia y es agresivo al mismo tiempo. Es el más completo. Es listo, entiende al equipo y sabe lo que hay que hacer para llegar a tener el mejor coche
Toda manifestación positiva de la vida es agresiva. Gran parte de la perniciosa inhibición de la agresividad que sufren nuestros niños obedece a la equiparación de agresivo con perverso
Se estremeció, como ante algo inevitable y pavoroso recordó muy de pasada que la vida nunca es agradable y grata, que hay un fin misterioso y horrible para todas las cosas, y penetró, hallándose en una sala muy amplia ilumina da por la luz del sol.
Lo que siguió entonces fue una exhaustiva comparación de detalles y un momento de pavoroso silencio cuando el detective y el científico llegaron a la conclusión de la práctica identidad de la frase común a aquellos dos rituales diabólicos pertenecientes a mundos tan diferentes y distantes entre sí.
Hay algo amenazante en un silencio demasiado grande.
El dolor físico es la señal de una perturbación del organismo, la presencia de una influencia nefasta para él mismo; nos abre los ojos sobre un peligro amenazante y nos previene por el sufrimiento que nos depara para que tomemos las medidas de defensa. Lo mismo ocurre con el dolor moral que causa la injusticia intencional, la arbitrariedad.
El signo más alarmante del estado de nuestra sociedad ahora es que nuestros dirigentes tienen el valor de sacrificar las vidas de los jóvenes en la guerra, pero no tienen la valentía de decirnos que debemos ser menos codiciosos.
Wikileaks ha publicado más documentos clasificados que toda la prensa mundial junta. Eso no es algo que diga para demostrar lo exitosos que somos sino, más bien, para mostrar el alarmante estado del resto de los medios de comunicación
Nada sabrás de lo que padecí en tu ausencia, de la sangre que derramé sólo con la esperanza de liberarme de ti. Pensarás que ha sido un día como tantos otros. Pero yo sabré que en este día, en este día semejante al que divide el A.C. Del D.C., me armé de valor para llevar a cabo un plan tremendo y contundente que no sometí a tu aprobación.
El horror de aquel espectáculo, la ignorancia de los circunstantes sobre cómo había acaecido la desgracia y, ante todo, el tremendo fenómeno que tenía ante él, dejaron al príncipe sin habla.