Dejar que digan, escucharlo, sufrirlo todo; no espantarse por nada y continuar con fidelidad y buen ánimo
¿Qué le hubiera gustado ser si no hubiera sido escritor? -Me hubiera gustado ser detective de homicidios, mucho más que ser escritor. De eso estoy absolutamente seguro. Un tira de homicidios, alguien que puede volver solo, de noche, a la escena del crimen, y no asustarse de los fantasmas.
Nadie debe asustarse de lo que piensa: porque todo ha de ser pensado por alguien, y el mayor desatino puede ser un punto de vista de lo real.
Súbitamente comprendí que todas las cosas sólo van y vienen incluido cualquier sentimiento de tristeza: también se irá: triste hoy alegre mañana: sobrio hoy borracho mañana ¿Por qué inquietarse tanto?
Desear lo mejor, recelar lo peor y tomar lo que viniere.
Es más vergonzoso desconfiar de los amigos que ser engañado por ellos
La primera obligación de la inteligencia es desconfiar de ella misma.
Ponemos más interés en hacer creer a los demás que somos felices que en tratar de serlo.
Estamos habitando un mundo real donde los acontecimientos poseen causas comprensibles y esas causas producen efectos. Nunca hemos tenido ninguna misión sagrada, y sería fatal creer otra cosa. Pero tenemos el derecho a la autoconservación. Sepamos qué es lo que queremos conservar. Luego el sentido común y el viejo valor probablemente nos ayudarán a seguir adelante.
Se ha dicho que el analfabeto del futuro no será aquel que no conozca por cierto las letras, sino quien no conozca la fotografía. Pero, ¿No hay que considerar del mismo modo analfabeto al fotógrafo incapaz de leernos sus propias imágenes?
Hay que considerar que ponemos nuestro corazón y nuestra alma en estos productos
Es más vergonzoso desconfiar de los amigos que ser engañado por ellos
Tendemos a desconfiar increíblemente de nuestras percepciones cuando ya son pasado y no se ven confirmadas ni ratificadas desde fuera por nadie, renegamos de nuestra memoria a veces y acabamos por contarnos inexactas versiones de lo que presenciamos, no nos fiamos como testigos ni de nosotros mismos
Me han enseñado a creer que el Dios de los cristianos no era este servidor cobarde y ambiguo de la gente, sino el creador y defensor sin piedad de la verdad. Se conoce que esto me ha echado a perder. ¡Siempre he tomado a mis maestros tan en serio!
El arte de vivir es el arte de saber creer en las mentiras.
...un príncipe no debe tener otro objetivo ni otra preocupación, ni debe considerar como suya otra misión que la de la guerra...
Estamos en el buen camino. No miréis ni a derecha ni a izquierda, porque éste es el mejor para nosotros. No nos distraigamos en considerar la hermosura de otras vías, saludemos simplemente a quienes transitan por ellas y digámosles con sencillez: que Dios nos guíe hasta encontrarnos en su morada
Somos más sociables y nos hacemos estimar más por vuestro corazón que por nuestro talento
La riqueza invertida es capital, una magnitud pecuniaria medida en términos de valor y determinada con respecto a su magnitud que proviene de estimar la ganancia esperada de la propiedad de esta riqueza invertida.
Dejar que digan, escucharlo, sufrirlo todo; no espantarse por nada y continuar con fidelidad y buen ánimo
Súbitamente comprendí que todas las cosas sólo van y vienen incluido cualquier sentimiento de tristeza: también se irá: triste hoy alegre mañana: sobrio hoy borracho mañana ¿Por qué inquietarse tanto?