Todos debemos auxiliar a nuestro prójimo, porque las buenas acciones raras veces quedan sin recompensa, y aun en el caso de no obtenerla, al menos su práctica no puede causar la muerte, ni perjuicio, ni ignominia.
Pero soy voraz con la vida. Hago demasiado de todo durante todo el tiempo. De repente, un día me fallará el corazón. El Cangrejo de Hierro me llevará como se llevó a mi padre. Pero yo no le tengo miedo al cangrejo. al menos habré muerto de una enfermedad honorable. Tal vez, en mi lápida, inscriban: Este hombre murió a fuerza de vivir demasiado.
La educación es por lo menos una forma de culto de la voluntad, no de cobarde culto del hecho.
Parece que hoy toca hablar de Madrid. Madrid es una gran ciudad, o por lo menos una ciudad grande
Podía decirle también que conocer y amar a otro ser humano, aunque sea uno solo, es la raíz de toda sabiduría.
Finalmente hablamos del problema judío. En este punto el Führer se mostró tan decidido y resuelto como siempre. Los judíos tienen que desaparecer de Europa, aunque sea necesario emplear para ello los más brutales procedimientos.