La butaca que giraba en el vagón panorámico volvió a su memoria. Era como si viera su propia soledad, que giraba y giraba dentro de su corazón.
Tú no serás caudillo si en la masa sólo ves el escabel para alcanzar altura. Tú serás caudillo si tienes ambición de salvar todas las almas.
A una vendedora de nopales que sale hoy en día a sentarse en la banqueta a vender sus productos de manera irregular, a ella le vamos a dar acceso para que pueda empacar sus productos, a que pueda echar a andar una pequeña empresa, a que pueda salir a venderlos a Estados Unidos
Uno tiene un representante o mánager, un masajista que le ablanda a uno el cuerpo, recibe consejos hasta del promotor, alguno se lleva más dinero que el propio boxeador; pero lo cierto es que cuando suena la campana, te sacan el banquito y uno se queda solo
Tú no serás caudillo si en la masa sólo ves el escabel para alcanzar altura. Tú serás caudillo si tienes ambición de salvar todas las almas.
Vamos aclarando el panorama, que hay pingüinos en la cama, por el hielo que provocas, si hace más de un mes que no me tocas, ni te dejas sobornar por este beso escurridizo, que busca el cielo y encuentra el piso
No es lo mismo una persona que tenga un inmigrante en su casa de servicio y viva en Sarrià o Pedralbes, que quien vive en un bloque y no puede vender su piso a precio de mercado porque cada día van más inmigrantes a comprar en la tienda de al lado.
La butaca que giraba en el vagón panorámico volvió a su memoria. Era como si viera su propia soledad, que giraba y giraba dentro de su corazón.
Tú no serás caudillo si en la masa sólo ves el escabel para alcanzar altura. Tú serás caudillo si tienes ambición de salvar todas las almas.
A una vendedora de nopales que sale hoy en día a sentarse en la banqueta a vender sus productos de manera irregular, a ella le vamos a dar acceso para que pueda empacar sus productos, a que pueda echar a andar una pequeña empresa, a que pueda salir a venderlos a Estados Unidos
Uno tiene un representante o mánager, un masajista que le ablanda a uno el cuerpo, recibe consejos hasta del promotor, alguno se lleva más dinero que el propio boxeador; pero lo cierto es que cuando suena la campana, te sacan el banquito y uno se queda solo
Tú no serás caudillo si en la masa sólo ves el escabel para alcanzar altura. Tú serás caudillo si tienes ambición de salvar todas las almas.