El amor ahuyenta el miedo, y recíprocamente el miedo ahuyenta al amor. Y no sólo al amor expulsa; también a la inteligencia, la bondad, todo pensamiento de belleza y verdad, y sólo queda la desesperación muda; y al final, el miedo llega a expulsar del hombre a la humanidad misma.Probervia.net
Aquí ya no cabe nadie más. Hay que expulsar a los musulmanes. ¡No queremos musulmanes, ni en Cataluña, ni en España, ni en Europa, ni en Occidente! ¡Viva España cristiana!
La libertad resulta acreditada en la lengua propia por su tensión al lenguaje puro. El redimir en la lengua propia ese lenguaje puro que se encuentra como cautivo en la lengua extraña, liberar el lenguaje preso en la obra misma al reescribirla, es la tarea para el traductor.
Prepárense, hombres y mujeres, a liberar toda Libia.