Nada hay en éste mundo más digno de lástima que un hombre irresoluto que oscila entre dos sentimientos.
La pluma está en mi mano vacilante y medrosa, pero en mi corazón no florecen los versos.
Me vi abrumado de felicitaciones, bendiciones y abrazos. Yo lo recibí todo con manos temblorosas, labios fríos, cerebro vacilante y un corazón que se me había vuelto de piedra. Todo desfilaba ante mí como un sueño. Observaba aquel desfile sin pensar siquiera en quién iba a ser la víctima.
Ritmo. Signos que siempre son clave. Imágenes fugaces. titubeante como una música de sombras redimidas.
Hay muchos hombres que tienen miedo a ser directos y hablar abiertamente de lo que desean y de lo que sienten. No tengas miedo a sexualizar y a reflejar tu interés. De hecho, si das muchas vueltas, probablemente ella te catalogue de inseguro y se canse de ti.
No hay nada tan inseguro como la grandeza de los reyes.
El Arte tiene una dimensión única, lo infinito, y éste es un misterio, ese algo maravillosamente indefinido e indefinible que esta mas allá de nuestra ciencia, de nuestra comprensión y de nuestra verdad intelectual y física. Pues entonces, será hasta donde mi ser, mis fuerzas, mis facultades y mi capacidad intelectual digan finalmente ¡basta!
La palabra es la muerte de la cosa. (Es decir: con el símbolo queda anulado lo indefinido de algo real y luego con esa muerte de la cosa aparece el objeto sustituyéndola).
Nada hay en éste mundo más digno de lástima que un hombre irresoluto que oscila entre dos sentimientos.
Ustedes podrán deducir que el mensaje es que la única manera de ser feliz es creyendo en un más allá. Y no se equivocarían. Creo firmemente que la vida es algo terrorífico e inestable para el resto de los mortales. La única manera de sobrevivir es engañándose a uno mismo, la gente está desesperada por encontrar algo en lo que creer.
Debido a que mi madre era contraria a que me convirtiera en artista, emocionalmente empecé a ser muy inestable y sufrir crisis nerviosas. Fue desde entonces que empecé a recibir tratamiento psiquiátrico. Al traducir el miedo de las alucinaciones en las pinturas, estuve tratando de curar mi enfermedad. Mi arte mantiene una estrecha relación con mi salud mental.
El ocio hace siempre inconstante el espíritu
Todo cambia en este mundo, e inconstante es la vida humana, y sujeta a muchos errores.
Hay que aprender a enfrentar la incertidumbre puesto que vivimos una época cambiante donde los valores son ambivalentes, donde todo está ligado. Es por eso que la educación del futuro debe volver sobre las incertidumbres ligadas al conocimiento.
El amor siempre es cambiante y un aprendizaje constante.
La potencia al golpear viene de una torsión rápida de la cintura, y no de un movimiento oscilante de balanceo.
Entre cada punto del cuerpo social, entre un hombre y una mujer, en una familia, entre un maestro y su alumno, entre el que sabe y el que no sabe, pasan relaciones de poder que no son la proyección pura y simple del gran poder del soberano sobre los individuos; son más bien el suelo movedizo y concreto sobre el que ese poder se incardina, las condiciones de posibilidad de su funcionamiento.
Pienso que una obra de arte debería dejar perplejo al espectador, hacerle meditar sobre el sentido de la vida.
Ningún timorato llegó a las altas cumbres