Me considero un rojo sin diminutivos. No soy un rojillo, soy un rojo, un rojazo. Y eso no quiere decir comunista, ni socialista, ni anarquista, quiere representar esa hermosísima ideología de hace unos años, que hacía creer que esta infamia de mundo podía cambiar de alguna manera.
Yo he visto llorar muchos hombres por la infamia con que se les entregaba; y yo mismo he llorado más que otro alguno, cuando a las tres de la tarde del 27 de junio de 1806, vi entrar a 1.560 hombres ingleses, que apoderados de mi patria se alojaron en el fuerte y demás cuarteles de la ciudad.
La unidad de Gaviria: ése mide 280 Uribes, que es la máxima posible indignidad y bellaquería a que puede llegar una persona en Colombia.
El sexismo es una indignidad específicamente moderna.
Dos personas miran al exterior a través de los mismos barrotes: la una ve el fango y la otra las estrellas
Increíble el primer animal que soñó con otro animal. Monstruoso el primer vertebrado que logró incorporarse sobre dos pies y así esparció el terror entre las bestias normales que aún se arrastraban, con alegre y natural cercanía, por el fango creador.
La sociedad expresa, cada vez que puede, aspiraciones que el sistema político no registra cabalmente. Los ciudadanos, por exclusión, autoexclusión, desesperanza o sometimiento a la disciplina social, son rehenes de un mecanismo cuya sensibilidad está cada día más desmarcada del sentir popular.
La aptitud para romper con el hábito es un don excepcional. Y pareciera apropiado llamar inspiración al derrumbe de ese sometimiento poderoso, casi siempre súbito y siempre liberador. El término es antiguo, y aún para muchos, venerable.
Hoy es muy difícil no ser canalla. Todas las presiones trabajan para nuestro envilecimiento personal y colectivo.
Nada más simple que amar el envilecimiento y encontrar goces en el desprecio.
Nadie puede estar en las filas de la izquierda si está a favor del maltrato a los animales. Vamos, a Pablo Iglesias le hablaban de los toros y blasfemaba
El pecado se encuentra solamente en querer herir a otras personas innecesariamente. Todos los demás pecados son disparatados inventos. El auto maltrato no es un pecado... Es simplemente estúpido.