La humanidad tiene tres grandes enemigos: la fiebre, el hambre y la guerra, de los cuales el mayor, por mucho, es la fiebre.
En la historia de la humanidad abundan exhumaciones de vidas privadas, y nadie protesta. Si juzgamos a los muertos, que no pueden defenderse ni atacarnos, ¿Por qué no juzgaremos de igual modo a los vivos, que tienen lengua para hablar y manos para mover la pluma y la espada?
Hago saber a los paisanos criollos, que viendo el yugo fuerte que nos oprime con tanto el pecho, y la tiranía de los que corren con este cargo sin tener conmiseración de nuestras desdichas y exasperado de ellas y de su impiedad, he determinado sacudir este yugo insoportable y contener el mal gobierno que experimentamos de los jefes que componen estos cuerpos
La conmiseración con los animales está íntimamente ligada con la bondad de carácter, de tal suerte que se puede afirmar seguro que quien es cruel con los animales, no puede ser buena persona. Una compasión por todos los seres vivos es la prueba más firme y segura de la conducta moral.
La mujer que quiera ser virtuosa no debe tener piedad de sus manos.
El Führer ha vuelto a expresar su determinación de eliminar sin piedad a los judíos de Europa. Debe desaparecer todo sentimentalismo remilgado. Los judíos son los que han provocado la catástrofe que se les avecina. Su destrucción irá unida a la destrucción de nuestros enemigos. Debemos acelerar este proceso sin piedad.
El rostro social y político del anarquismo es una sociedad libre, anti-autoritaria, que establece la libertad, la igualdad y la solidaridad entre todos sus miembros.
Ella, joven, pálida, con una de esas profundas bellezas que más que en el rostro aun bien hermoso residen en la perfecta solidaridad de mirada, boca, cuello, modo de entrecerrar los ojos. Era, sobre todo, una belleza para hombres, sin ser en lo más mínimo provocativa; y esto es precisamente lo que no entenderán nunca las mujeres.
¿Qué influencia puede ejercer sobre mí esta opinión vulgar? Esta opinión no nos afecta sino en razón de nuestra sensibilidad; pero si a fuerza de sabiduría y reflexión, logramos ahogar esta sensibilidad hasta el punto de no sentir sus efectos, incluso en las cosas que nos conciernen más directamente, resultará imposible que la opinión buena o mala de los otros, pueda influir en nuestra felicidad.
El idioma del corazón es universal: sólo se necesita sensibilidad para entenderle y hablarle
... las imágenes [visuales] de sufrimiento son muy importantes, porque pueden contribuir a despertar empatía y buena voluntad.
La empatia es la cocaína del hombre pobre
El altruismo es la doctrina que exige que el hombre viva para los demás y coloque a los otros sobre sí mismo.
Se nos ha enseñado que el ego es sinónimo de mal y el altruismo el ideal de la virtud. Pero mientras el creador es egoísta e inteligente, el altruista es un imbécil que no piensa, no siente, no juzga, no actúa. Esas son funciones del ego