Mi principal afición es burlarme de las personas que se toman a sí mismos demasiado en serio por la calidad de sus conocimientos y que no tienen las agallas para decir a veces: No lo sé...
...e imaginé a otro hombre con las falanges rozando el suelo y respirando por medio de agallas eléctricas que le insuflaban aire en los pulmones muertos.
¿Cuándo se nos concederá el privilegio de respirar aire fresco?
El hecho de que la improvisación se pierde en el aire nos hace apreciar que cada momento de la vida es único... Un beso, un atardecer, una danza, un chiste. Ninguno volverá a repetirse de la misma manera. Cada uno sucede una sola vez en la historia del universo.
La espiritualidad y la ciencia verdadera (en su forma de mente abierta, sincera) son esencialmente una. Es la ciencia dominante y la religión dominante lo que ha causado la grieta aparente porque ellas son esclavas de arrogancia y dogma. Una no es ciencia y otra no es espiritualidad. Son dos polaridades de la misma falsedad.
¿Hasta cuándo, simples, amaréis vuestra simpleza y arrogantes os gozaréis en la arrogancia y necios tendréis odio a la ciencia? 23 Convertíos por mis reprensiones: voy a derramar mi espíritu para vosotros, os voy a comunicar mis palabras.
No hagas estima de ti por tu apersonamiento físico o los bienes que la fortuna te deparó, sino por tu prestancia moral o los bienes del alma.
El auditor, en lenguaje, es un interlocutor: la egophoria pone a su disposición el yo y la posibilidad abierta de responder en todo momento. El auditorio, en música, no es un interlocutor. Es una presa que se estrega a la trampa.
El sacrificio propio nos deja en disposición de sacrificar a los demás sin sonrojamos.