La enseñanza primaria enseñanza para el proletariado proletariza a sus funcionarios. El Estado condena a sus maestros a una perenne estrechez pecuniaria. Les niega casi completamente todo media de elevación económica o cultural y les cierra toda perspectiva de acceso a una categoría superior.
Lo único que se acepta universalmente es la estrechez de miras.
La paz no es únicamente la ausencia de guerra o violencia, sino el fortalecimiento de los aspectos positivos que la edifican, como son la armonía, la cohesión, la colaboración y la integración.
La humildad y la sumisión sólo conducirán al fortalecimiento y la preservación de cautiverio.
Los políticos totalitarios exigen obediencia y conformidad en todas las esferas de la vida, incluso, por supuesto, la religiosa. Su propósito es utilizar la religión como instrumento de consolidación social, como una contribución a la mayor eficiencia militar del país. Por este motivo, la única clase de religión que fomentan es estrictamente antropocéntrica, excluyente y nacionalista.
Las experiencias vividas por los panameños entre 1821 y el establecimiento del Estado Federal Soberano en 1855, significaron una transformación política y cultural que puede estimarse decisiva en la consolidación de la nacionalidad panameña.