Macri respeta más el reglamento de la AFA que la Constitución de la Ciudad
El reglamento de 1998 es una mierda; los mediocres podrán ganar
La agricultura fue antaño un trabajo sagrado. Cuando la humanidad se apartó de su ideal, apareció la moderna agricultura comercial. Cuando el agricultor comenzó a hacer cultivos para ganar dinero, entonces olvidó los verdaderos principios de la agricultura.
Quien se esfuerce en cumplir con su deber en conciencia, está llenando ya el fin para que ha sido creado y pone en sí los principios de un carácter viril
En todas las organizaciones las expresiones clave son flexibilidad, rentabilidad, justo a tiempo, cronocompetencia, demora cero: orientaciones que dan testimonio de una modernización exasperada que vuelve a encerrar el tiempo en un lógica de la urgencia.
Llamo intereses a las orientaciones básicas enraizadas en las condiciones fundamentales de la posible reproducción y autoconstitución del género humano, es decir, en el trabajo y en la interacción
Una vez que te abandonas a una metáfora, Claudio, cosa que sucede muy rara vez, la sigues demasiado lejos. Sin duda recordarás las instrucciones de Atenodoro contra esas cosas. Bueno, llama gusano a Seyano y termina con eso. Y vuelve a tu estilo habitualmente sencillo.
La Tierra es una nave espacial que se nos entregó sin manual de instrucciones
En lo profundo del alma nuestra, poco a poco se ha ido gestando la noción de que hacer bien las cosas o respetar las normas equivale a una muestra de debilidad.
Un director de cine es un lector de las normas de tráfico. Un buen director de cine es un buen interpretador de un guión bueno. Y un gran director de cine es el que sabe ofrecer una visión distinta del mundo.
Uno de los fundamentos de la libertad consiste en poder hacer mal uso de ella.
El que deseche la religión quita los fundamentos de la sociedad humana.
Esta influencia del hogar y la familia se prolonga en la experiencia de la escuela. En ella, los educandos descubren temprano que, como en el hogar, para conquistar ciertas satisfacciones deben adaptarse a los preceptos que se establecen en forma vertical. Y uno de estos preceptos es el de no pensar.
Huye de los preceptos de los especuladores cuyas razones no están confirmadas por la experiencia.
En el sacerdote, como en el alienista, siempre hay algo de juez de instrucción
Esas personas que sólo piensan en ellas mismas son terriblemente incultas. No son educados pero con instrucción pueden llegar a serlo.