La próxima generación está buscando a sus propios líderes y lucharán para proteger sus propios intereses nacionales. Así que ya pueden coger su moralidad, su arrepentimiento y su democracia, ¡e ir a vendérselas a otro!
La razón es como una olla de dos asas; se la puede coger por la derecha o por la izquierda.
¡Ah, es menester saber las miserias de esta vida puerca, comer el hígado que en la carnicería se pide para el gato, y acostarse temprano para no gastar el petróleo de la lámpara!
Después de todo, pero después de todo, sólo se trata de acostarse juntos, se trata de la carne, de los cuerpos desnudos, lámpara de la muerte en el mundo.
Cualquier persona, por ignorante que sea, está convencida de poseer al menos una de las llaves del cofre de la sabiduría... y quizá esté en lo cierto.
Pero, aunque nuestro pensamiento aparenta poseer esta libertad ilimitada, encontraremos en un examen más detenido que, en realidad, está reducido a límites muy estrechos, y que todo, este poder creativo de la mente no viene a ser a ser más que la facultad de mezclar, trasponer, aumentar o disminuir los materiales suministrados por los sentidos y la experiencia.
Hay menos maneras de hacer el amor de lo que se dice, pero más de lo que se cree.
Tocar guitarra acústica es como hacer el amor con ropa, sabes cómo se hace pero es más difícil
Es un error vivir el presente como si sólo fuera el prefacio de la bella novela del porvenir. El presente se ha de usar y gozar
De lo que jamás podrán acusarme es de enriquecerme, ¿por qué?, porque el que se enriquece se va a gozar fuera. Allá en Miami, o en París o en Nueva York. Y quiere superar su estatus de peruano, de país subdesarrollado viviendo allá con millones malhabidos. Yo jamás señor.
Tener la satisfacción cuando vas a dormir de que no se te queda nada por dentro, que todo lo has dicho; has tenido la honestidad de reconocer lo bueno y criticar lo malo. Yo creo que eso para dormir es el mejor sedante.
Media noche de escarcha. Para dormir me cubro con la manga del espantapájaros un día de tranquila alegría.