Nadie te hace caso si no protestas, si tu operador telefónico no funciona, si no dices que te vas a cambiar, no te lo arreglan.
Aunque arriesgado y difícil, procurar primero comprender, o diagnosticar antes de prescribir, es un principio correcto que se pone de manifiesto en muchas áreas de la vida. Es la marca de todos los verdaderos profesionales, tanto del médico clínico como del oculista.
Me estás vedada tú... Soy un fracaso de confesor y médico que siente perder a la mejor de sus enfermas y a su más efusiva penitente.
Nadie te hace caso si no protestas, si tu operador telefónico no funciona, si no dices que te vas a cambiar, no te lo arreglan.