Un cobertizo para bicicletas es una construcción; la Catedral de Lincoln es una pieza de arquitectura. El término arquitectura se aplica sólo a los edificios diseñados con un atractivo estético.
El gran atractivo del teatro, para el actor, sobre todo para el actor que tiene conciencia de que es actor, es esta especie de juego humanístico que es ser el mismo y al mismo tiempo muchos otros.
La fascinación por el teatro entró en mi alma gracias a tres acontecimientos que marcaron profundamente mi alma infantil: participé en el entierro de un bombero, vi un ataque epiléptico y escuché cantar al príncipe chino.
Todos sabemos la fascinación que ejerce el vicio del juego y qué difícil es también salirse de él.
Ningún otro fin me condujo a aquellos remotos países que el contribuir con mis escasos conocimientos y buen celo al bienestar de sus sencillos habitantes dándoles a conocer las ventajas de la civilización, cuando va acompañada de los consuelos, de la gracia y luminosos conocimientos que trae en pos de si, la religión del crucificado.
A veces amar es una pesada cruz, pero tú eres tan simplemente bella...El secreto de tu gracia es igual a la clave del enigma de la vida.
La sociedad es en todos los sitios una conspiración contra la personalidad de cada uno de sus miembros
Las críticas interesadas por perversas e intencionadas que fueran, no llegaron jamás a tocarme, porque demasiado sé que estoy acorazado con los respetos más altos de que pueda estar revestida la personalidad humana, y ellas no alcanzaron a tener influencia alguna en las decisiones de mi espíritu ni en la idealidad subjetiva de mis propósitos.
La U es mucho más que un club de fútbol. Es un mito, una leyenda, una tradición, una de las más hermosas historias que ha escrito el deporte peruano. Es un mito que nos ha hecho vibrar a lo largo de los años con sus victorias, que nos ha hecho sufrir con sus derrotas y percances y nos ha hecho renacer en entusiasmo con su garra y pundonor.
El odio se amortigua detrás de la ventana. Será la garra suave. Dejadme la esperanza