La verdad es que no conviene ser presidente, sino vice. Si las cosas marchan bien, el presidente anda de viaje y el vicepresidente disfruta de la vida. Ocupa el sillón presidencial, se fuma los cigarros del presidente, abre los cajones, le lee las cartas y se divierte como loco. Y si las cosas marchan mal, al presidente lo echan y el vice se queda de patrón.
Vivimos, morimos y la muerte a nada pone fin Seguimos viaje hacia la pesadilla.
Varias cosas ciertas son contradichas. Varias cosas falsas no son contradichas. La contradicción es la señal de la falsedad. La no contradicción es el signo de la certeza.
Cuando la derrota viene, acéptalo como una señal de que tu planes no son sólidos, reconstruye esos planes y embárcate otra vez hacia tu meta codiciada. Si te rindes antes de que tu meta haya sido alcanzada, eres un perdedor