Un peligroso cruzar, un peligroso mirar hacia atrás, un peligroso estremecerse y detener el paso.
Una mosca, señor, puede picar a un caballo majestuoso y hacerlo estremecerse de dolor; pero la primera seguirá siendo nada más que un insecto, y el segundo, empero, un caballo.
Nuestra bandera no es un símbolo de un partido político porque ha de serlo de todos; no es un símbolo de la derecha ni de la izquierda porque ha de ondear en todo el espectro ideológico constitucional; no es un símbolo de los militares, aunque la custodian y la honran, sino también de los civiles
...si usted es capaz de temblar de indignación cada vez que se comete una injusticia en el mundo, somos compañeros, que es más importante.
Trescientos cincuenta aviones ingleses descargaron medio millón de kilos de explosivos sobre Ijmuiden (Holanda), haciendo temblar las casas como hojas al viento.
Los jinetes, dispersándose por todo el terreno que era seguro, lo iban quemando, y los peltastas, que iban en paralelo por las cimas, incendiaban todo cuanto veían que era combustible, y el ejército, también, si topaba con algo que quedaba a un lado, de manera que el país entero parecía arder y el ejército ser muy grande.
En general a mí las ideas se me ocurrían cuando espantaba recuerdos o cuando sentado a mi escritorio de ideas jugueteaba con la réplica del puñal de Sandokán, o miraba arder el fuego de la salamandra o miraba el cielo a través de la ventana.
Generalmente, trabajamos más para enojar a quienes nos atacan, que para alegrar a quienes nos apoyan. En Chile me pasó esto último.
Cuando asiento mis pies en tierra firme no me los hace menear ni un terremoto.
La finalidad del artista es enfurecer