(...) un entrenador omnipotente, omnipresente y malasangre, un quejica que acusa a otros siempre, un individuo dictatorial, ensuciador y enredador, soporífero en sus declaraciones, nada inteligente, mal ganador y mal perdedor, y que, como dijo Di Stéfano, hace que el Madrid juegue como un ratón mientras el Barça juega como un león.
Junto con lo bueno viene lo malo. Así parece ser la vida. Internet hace posible encontrar con rapidez información, pero una gran cantidad de ella está mal documentada, es falsa o completamente errónea. El consejo médico que obtuvo en Internet podría haber venido de un ganador del Premio Nobel o de un desertor de la preparatoria.
Cuando hayas hecho y conseguido muchas cosas dedícate únicamente a una, y esta hazla muy bien. Esta es la preocupación final más noble de todo triunfador
Un triunfador es aquel que se levanta y busca las circunstancias que desea y si no las encuentra las fabrica.
¿Por qué, al hablar del futuro, emplea Karl Marx el presente?, pregunta con aire triunfante nuestro filósofo. Puede usted, muy respetado crítico, mirar en cualquier gramática y verá que el presente se usa en lugar del futuro cuando este futuro es tenido por algo inevitable e indudable.
Por eso creemos que una revolución puramente obrera, en beneficio único de los obreros, produciría los mismos resultados que las sediciones de los pretorianos y los movimientos de los políticos. triunfante la clase obrera y en posesión de los medios opresores, al punto se convertiría en un mandarinato de burgueses tan opresores y egoístas como los señores feudales y los patrones modernos.
El mundo tiene sed de amor: tú la apaciguarás, ¡oh esplendor de la carne! ¡Oh esplendor ideal! ¡Oh renuevo de amor, triunfal aurora en la que doblegando a sus pies los dioses y los héroes, la blanca Calpigia y el pequeño Eros cubiertos con nieve de las rosas las mujeres y las flores su bellos pies cerrados!
La vida es toda una lucha, cuya palma triunfal está en los cielos
El invicto Hércules, mi hijo laborioso, que con los despojos del león y su maza parece que defienda las veintiocho estrellas que se ha ganado con más acciones heroicas que ningún otro haya hecho jamás,...
De ser un cineasta muerto de hambre que lucha por sobrevivir a ser increíblemente exitoso en un período de un par de años es absolutamente una experiencia muy fuerte, y no necesariamente buena
Todo pasa, menos la adúltera. En los bares y en los velatorios, en la esquina y en las farmacias, hay siempre alguien hablando de las señoras que traicionan a sus maridos. El amor exitoso no interesa a nadie.