Cuando hayas hecho y conseguido muchas cosas dedícate únicamente a una, y esta hazla muy bien. Esta es la preocupación final más noble de todo triunfador
El desafío forma al triunfador y no cabe desafío sin riesgo al fracaso, pues el éxito y el fracaso son un tejido de la misma textura.
La guerra es castigo tanto para el victorioso como para el vencido.
Un ejército victorioso gana primero y entabla la batalla después; un ejército derrotado lucha primero e intenta obtener la victoria después.
El conquistador es siempre un amante de la paz; preferiría sin duda someter nuestro país sin tener que combatir.
A un ejército conquistador apostado en la frontera no se le detiene con elocuencia.
Presume Satanás de airoso y lindo.
Nunca jamás una carta a nadie, un mensaje, un retrato, ni la más leve esperanza. Siempre, a través de los años, el mismo silencio, la misma espera sin fin. Tan sólo aquel airoso caballo negro y aquella alegre yegua blanca que, al caer la tarde, solían mirar el castillo desde un promontorio, para enseguida escapar muy junto galopando como alma que lleva el diablo y sacudiendo sin cesar las crines.
No te limites a ti mismo diciendo: si sólo tuviera ésto, o aquello. Puedes pensar en todas las cosas que no tienes, pero yo te pregunto ¿Es esto realmente constructivo? No, porque no hay forma de regresar el tiempo, depende de ti, de lo que estás haciendo hoy, tus prioridades, tu agenda diaria, va a determinar qué tan exitoso eres
La impresionante mayoría de las personas actualmente vivas percibe como valor tan sólo aquello que resulta exitoso y apropiado para sobrepasar al prójimo en la competencia despiadada. Cualquier medio que sirva a este fin aparece engañosamente como un valor en sí mismo.