Todo el aspecto sentimental de nuestra sensibilidad estética sin el cual ésta sería perceptiva y matemática más que estética- se debe a nuestra constitución sexual remotamente excitada.
No aspires a ser feliz. No puedes ser feliz. No mereces ser feliz. Resígnate a ser infeliz. Puede que entonces conozcas algo remotamente parecido a la felicidad.
No aspires a ser feliz. No puedes ser feliz. No mereces ser feliz. Resígnate a ser infeliz. Puede que entonces conozcas algo remotamente parecido a la felicidad.
Todo el aspecto sentimental de nuestra sensibilidad estética sin el cual ésta sería perceptiva y matemática más que estética- se debe a nuestra constitución sexual remotamente excitada.