Julio. ¿Qué pasa aquí? ¿No se abre la puerta? Supongo que han cambiado la cerradura o está estropeada.
La noche, que me espía por el ojo de la cerradura del sueño, gotea estrellas de ruidos inconexos.
La oración debería ser la llave del día y el cerrojo de la noche.
No hay barrera, cerradura ni cerrojo que puedas imponer a la libertad de mi mente.